Pamplona - Tres proveedores tienen en vilo a los responsables de compras de Volkswagen Navarra. Los tres son italianos, se ubican en Lombardía, Veneto y Piamonte, y suministran regularmente tres piezas que llegan continuamente a Landaben: se trata del protector calórico ubicado bajo el motor, la bandeja trasera del portón y la moldura del portón trasero del T-Cross.

Todos los ojos están puestos en estas fábricas, que de momento trabajan con normalidad, pero que lo hacen en el país europeo más afectado por el coronavirus, que ayer mismo decidió suspender la actividad escolar y universitaria hasta el 15 de marzo. "La actualidad cambia todos los días y no sabemos qué puede suceder", explicaban ayer desde la fábrica, cuya dirección planteó ayer las líneas maestras del Expediente de Regulación Temporal de Empleo de carácter preventivo que quiere pactar con el comité de empresa. Se trataría de un ERTE abierto, con duración estimada hasta final de año y al que la empresa podría recurrir si alguno de sus proveedores le falla.

Como el resto de las empresas de automoción, Volkswagen trabaja bajo el sistema de just in time de tal manera que reduce al minino el almacenaje de piezas. Como máximo dispone de remanente para entre tres y seis días. En el caso de las tres piezas que llegan desde zonas de riesgo italianas, en dos de ellas (bandeja y moldura del portón), Volkswagen podría optar por fabricar los coches sin ellas y almacenarlos durante una semana, a la espera de la llegada de estos componentes, que serían instalados posteriormente en el coche. Volkswagen puede acoger en sus aparcamientos internos cerca de 10.000 coches. En el caso de la otra pieza, el protector calórico, esta solución no es factible: debe instalarse durante el proceso habitual de montaje del coche.

La situación italiana resulta así más compleja incluso que la china, donde Volkswagen Navarra cuenta con más de 80 proveedores, en algunos casos indirectos, que están enviado las piezas por avión para recuperar el tiempo perdido. Estas piezas son recibidas por proveedores locales para su montaje en componentes que posteriormente pasan al Polo y al T Cross.

Con todo ello, UGT entiende que, debido al desconocimiento de la magnitud e impacto del problema, "no hay herramientas en convenio que pueda cubrir tal situación". "Por ello apostamos por la del ERTE, dado que es la medida más solidaria para una plantilla a la que no sería justo aplicarle medidas de flexibilidad por semejante problema, explicaba ayer Alfredo Morales, presidente del comité de empresa.

Eugenio Duque, responsable de la sección de CCOO, insistía ayer en la necesidad de acotar el ERTE a la crisis del coronavirus y en concreto a la falta de piezas, para que no pueda ser activado por otras circunstancias, como una hipotética caída en la producción por otros motivos.

El resto de secciones sindicales, explicaba LAB, que ya presentó sus propuestas el lunes, se oponían a la activación del ERTE como medida inicial. Así, ELA reclamaba defender la jornada de referencia pactada (209 días) y convertir los siete días de competitividad en jornada industrial. "Se debería evitar abrir el paro y que pague el conjunto de la sociedad", explicaba Igor Peñalver.

Por su parte, Óscar Añorbe, de CGT, reclamaba una reducción de la jornada y el reparto del trabajo para hacer frente a una posible falta de piezas. El sindicato reclamaba asimismo que se imparta formación a los trabajadores y señalaba que su propuesta es viable, habida cuenta de los más de 13.000 millones que ganó VW el año pasado.

apuntes

¿Por qué un ERTE abierto? A día de hoy, Volkswagen no sabe si deberá suspender la producción, ni durante cuantos días. Se desconoce también si habrá contagios entre la plantilla, algo que obligaría a tomar medidas complementearia ni si los días en que sea necesario parar serán seguidos o alternos.

Coste y recuperación. VW cifró en 650.000 el coste diario del ERTE y dijo que el objetivo es cumplir el programa por lo que se activarán medidas sI aumentan los pedidos del Polo o se amplíe la capacidad de los proveedores en el T-Cross.

apunte

Sin presentación de resultados

Rueda de prensa. Volkswagen ha cancelado por la propagación del coronavirus la rueda de prensa de presentación de los resultados del 2019, que estaba prevista para el 17 de marzo en la sede central de la compañía en Wolfsburg, anunciaron fuentes del grupo. La presentación del balance del pasado año se podrá seguir por internet. El grupo automovilístico ha adoptado medidas similares a las de otras empresas como Beiersdorf, que fabrica Nivea, o la farmacéutica Merck. También el Banco Central Europeo (BCE) va a aplicar algunas "precauciones operativas" por el COVID-19, y restringe los viajes no esenciales del Comité Ejecutivo y otros miembros de personal hasta el 20 de abril. Además el BCE va a posponer las conferencias en su sede central, con excepción de la rueda de prensa tras la reunión de política monetaria del Consejo de Gobierno, en las que intervienen la presidenta, Christine Lagarde, y el vicepresidente, Luis de Guindos.