- El Banco de España considera que hay un amplio margen para aumentar el teletrabajo en la mayoría de los empleos, pudiendo llegar hasta el 60% en el caso de los trabajos con mayor cualificación.

Según el artículo analítico El teletrabajo en España publicado ayer por la entidad, el 30,6% de los ocupados podría teletrabajar, al menos ocasionalmente, lo que supone 22,3 puntos porcentuales más que en la actualidad, lo que significa que solo el 8,3% teletrabaja.

La mayoría de los colectivos analizados tendrían margen de mejora pero las ocupaciones cualificadas son las que tienen un mayor número potencial de teletrabajadores, hasta llegar al 60%. Estos sectores cualificados serían el de los técnicos y profesionales científicos e intelectuales, los directores y gerentes, los empleados contables, los administrativos y otros empleados de oficina.

El Banco de España basa su informe en la Encuesta de Población Activa y señala que el porcentaje de ocupados en 2019 que trabajó ocasionalmente desde su residencia ascendió al 8,3%, 2,4 puntos porcentuales desde 2009.

La entidad afirma que la emergencia sanitaria ha obligado a muchas empresas a adoptar de forma excepcional y apresurada el teletrabajo pero incide en que más allá del teletrabajo como una solución para amortiguar los efectos negativos de una situación de confinamiento como la actual, existen estudios que muestran otras características vinculadas a la productividad.

“En la actual fase de desescalada el teletrabajo puede ayudar a un retorno progresivo a los puestos de trabajo que haga compatible la actividad con el mantenimiento de la distancia de seguridad y limitar la posibilidad de rebrotes”, señala el informe.

Según los análisis, los asalariados con contrato indefinido serían los que tendrían más margen para aumentar su potencial de teletrabajo, hasta en un 31% frente al 5% observado.

Por tamaño de la empresa, las superiores a 50 trabajadores son las que más podrían aumentar la parte de trabajo remoto y entre los sectores de actividad que tendrían más potencial están las actividades financieras y de seguros y de la información, que podrían duplicar el teletrabajo.

Entre el 5 y el 18%. La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) prevé que el PIB español caiga este año un 5% en relación a 2019, la mayor caída desde al menos 1955, si el periodo de recuperación de la crisis del COVID-19 se acortase a tres meses y las empresas reemprendiesen su actividad en las condiciones previas, pero podría alcanzar el 18% si su duración llegase a los 15 meses. Además, el déficit público rondará el 6% del PIB, alcanzando el 15% del PIB en el peor escenario.