El consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Manu Ayerdi, ha admitido que la suspensión de los Sanfermines de 2020 tendrá "un impacto" en la economía navarra, aunque ha llamado a "mirar con pleno optimismo a los próximos meses".

No ha cuantificado las pérdidas previstas ya que "existen estudios con cifras más antiguas", pero sí ha indicado que en los Sanfermines de 2018, último año con datos cerrados, hubo 521.000 visitantes en Pamplona y su comarca, de los que el 44 % eran internacionales, el 37 % residentes en Navarra y el 18 % de otras comunidades.

También ha destacado el peso del turismo internacional, "especialmente el de los franceses, que es impresionante" por tener estos visitantes "un carácter de proximidad e internacional al mismo tiempo" en las fiestas de San Fermín.

Por último, ha admitido que "el impacto económico de la cancelación existe" en las cuentas navarras, pero ha invitado al "trabajo convencido entre el sector y la ciudadanía en los próximos meses".