El número de explotaciones agrarias que pertenece a un titular que se dedica exclusivamente a esta profesión se encuentra en mínimos históricos en Navarra, de acuerdo a la estadística que maneja el departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Ejecutivo foral.

El informe Datos del registro de explotaciones agrarias de Navarra, correspondiente al año pasado, contabiliza 2.300 explotaciones de agricultores y ganaderos, de las que el 46% están dirigidas por personas que han cumplido 55 o más años.

El envejecimiento de los profesionales de esta actividad esencial para la sociedad, con el consiguiente problema del relevo generacional, preocupa para asegurar su futuro.

Cada año, peor

Entre 2008 y 2023, el peso de los agricultores y ganaderos de más edad ha aumentado en nueve puntos al pasar de representar el 37,3% del total al 46% actualmente. En cambio, los profesionales de menos de 40 años, aunque han aumentado su porcentaje en el periodo analizado, no ha sido lo suficiente como para asegurar ese relevo. Si hace 15 años sus explotaciones suponían el 16,2% del total, ahora suman el 18,5%.

Más avícola y frutas

Si se consulta el tipo de cultivo o ganadería que más profesionales ha perdido entre 2008 y 2023, de los 16 que analiza el informe, todos reducen el número de explotaciones, excepto avícola y frutas. La primera pasa de 45 a 55 granjas en este periodo; y la segunda, de 41 a 48. En cambio, en la parte negativa, los subsectores más perjudicados son la vid y el cereal.

A pesar de la disminución de número de agricultores a título principal (ATP), a quienes se considera que viven de esta actividad, la cifra de hectáreas cultivadas en estos 15 años en la Comunidad Foral no ha variado, ya que se ha mantenido estable, en más de 287.000 hectáreas, siendo el cereal en sus diferentes variedades aquello que más se siembra. En estos momentos, supone el 64,3% de la superficie cuando en 2008 aglutinaba el 73%, según la estadística de Desarrollo Rural. 

En el caso de la ganadería también ha habido un repunto de cabezas de ganado –incluye bovino, ovino, caprino y porcino–. Han crecido de 1,37 millones a 1,39 millones por el vacuno de leche –con la instalación de una macrogranja y la ampliación de explotaciones–, por el porcino con nuevas instalaciones ante el incremento de la demanda externa desde China en los últimos años –ahora está cayendo– y por el caprino. En cambio, los rebaños de ovejas han sufrido una reducción drástica, ya que se han quedado con un 40% menos.

Con estos datos, el sector se ha dirigido hacia la concentración de hectáreas y de cabezas de ganado en menos explotaciones. En 15 años han desaparecido 1.742 explotaciones, un descenso que no para. Muy preocupante.

Sin agricultores y ganaderos no hay pueblos

A esto se añade que parte de agricultores y ganaderos viven en pueblos con riesgo extremo de despoblación –concentrados en el Pirineo y parte de la Zona Media–, por lo que la necesidad de relevo es clave para vertebrar el territorio y evitar que desaparezcan municipios.

Esta semana el ambiente en el campo navarro se ha caldeado, contagiado por las protestas de agricultores iniciadas en Francia y que se han extendido en otros países europeos, como Portugal, Italia, Alemania, Polonia, Rumanía, y ahora en España. 

El sábado 27 de enero comenzó a circular un grupo de WhatsApp, al que se fueron uniendo agricultores y ganaderos de las diferentes comunidades autónomas.

UAGN convocó una rueda de prensa el martes 30 de enero para denunciar la crítica situación del campo y para exigir entre las medidas una reforma de la Política Agraria Común porque no está logrando su objetivo de consolidar el sector en la UE.

Además, reclaman que los productos procedentes de terceros países cumplan las mismas reglas de juego que agricultores y ganaderos de los estados miembros para favorecer una competencia leal.

EHNE defiende un cambio de modelo de la PAC, “cada vez más burocratizada”. Y la Unión de Cooperativas Agroalimentarias de Navarra (UCAN) se encuentran en la misma línea.

Las tres organizaciones quieren juntarse para impulsar movilizaciones en Navarra en la mejora del sector, mientras que agricultores y ganaderos se preparan para salir a la calle el día 6 –sin ninguna sigla, aunque parte de ellos están afiliados a alguno de los sindicatos agrarios –.