Navarra contabiliza 657 granjas en 2023, la cifra más baja en una década por la clausura de negocios en todas las modalidades de ganadería –vacuno de leche y de carne, ovino, caprino y porcino–. Únicamente en este periodo han crecido las granjas avícolas en intensivo.

El registro de explotaciones agrarias de Navarra, dependiente del departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, muestra que entre 2014 y 2023 en la Comunidad Foral han cerrado 132 explotaciones de agricultores a título principal (ATP) –denominadas así las personas que viven de esta profesión–. “Estamos inmersos en una crisis económica y estructural desde hace años, un escenario que provoca frustración entre ganaderos y ganaderas. Por eso, resulta complicado asegurar el relevo generacional en los valles navarros”, explicó Gonzalo Palacios, vicepresidente de UAGN. Este ganadero de vacuno de carne de Izal analizó la situación del sector en una rueda de prensa en la sede del sindicato este lunes, en la que también participó Beni Irurita, vocal de la Ejecutiva y ganadera de vacuno de leche en Lanz.

Gonzalo Palacios reclamó un plan de apoyo, políticas públicas eficaces y modernizar estructuras tanto para “la ganadería extensiva como intensiva”. Esta organización agraria defiende ambos modelos. “La primera actúa de cortafuegos contra fenómenos naturales y la segunda apuesta por la precisión, la eficiencia y realiza inversiones para favorecer el bienestar animal y proteger el medio ambiente”, detalló.

Más cabeza de vacuno y porcino

A pesar de que el número de granjas ha disminuido cada año, el número de cabezas de bovino y porcino ha crecido en intensivo, principalmente. En cambio, el de ovino y caprino ha bajado en los últimos diez años, más vinculado al extensivo.

(i-d) Beni Irurita, vocal, y Gonzalo Palacios, vicepresidente de UAGN, en la sede de la organización agraria. Iban Aguinaga

Palacios reprochó “los ataques infundados y las campañas de desprestigio a un sector que ofrece producto saludable y sostenible al consumidor”. El vicepresidente de UAGN exigió a los políticos que antes de legislar consulten con el sector y agilicen burocracia. “Todas las normativas deberían hacerse contando con nosotros, que sean más prácticas, y sin imponer las medidas desde un despacho, porque el papel lo aguanta todo y la realidad muchas veces es otra”, dijo Palacios. Además, reclamó que “no se priorice el medio ambiente frente a la ganadería en la legislación”, ya que “los principales interesados en que los animales y el medio ambiente estén bien son los ganaderos”. 

Medida sobre el estiércol

En relación a esta reivindicación, Irurita ejemplificó con los abonos orgánicos. Esta ganadera se mostró en contra de la modificación por motivos medioambientales de la orden foral 234/2005 que regula el almacenamiento temporal de estiércol sólido en el campo, por considerar que la limitación de tiempo propuesta –de cinco a diez días y enterrarlo en 12 a 24 horas– “es una medida que carece de sentido”, ya que “el estiércol que se almacena en las fincas en invierno se usa en primavera; y el del verano, se utiliza en breve”. Irurita añadió: “Puede que tenga que haber alguna adecuación de la normativa navarra, pero que no se nos lastre con un producto que realmente tiene muchas más ventajas que inconvenientes”. 

EVOLUCIÓN EN NAVARRA

Granjas/2023 (comparativa con 2014)

Vacuno de leche: 30 (-19)

Vacuno de carne: 196 (-13)

Mixto de carne y leche: 4 (=)

Ovino y caprino: 234 (-23)

Porcino: 56 (-9)

Avícola: 55 (+10)

Poliganadería: 27 (-13)

Mixto cultivo/ganadería: 55 (-65)

Total: 657 (-132)

Fuente: Explotaciones Agrarias de Navarra