Medio centenar de personas emprendedoras que tienen intención de implantar sus actividades no agrarias en localidades en riesgo de despoblación van a poder beneficiarse a partir de ahora de una ayuda de 40.000 euros.
El consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, José Mª Aierdi, ha presentado esta nueva línea de subvención dentro del programa Ideas que brotan/Ideiak loratuz, en el marco de la PEPAC. La línea consta de dos millones de euros para repartir un 50% en 2025 y la otra mitad en 2027.
La Dirección General de Desarrollo Rural, coordinada por Rubén Goñi, ha diseñado esta prima de 40.000 euros a fondo perdido para el inicio de actividad de personas físicas en pequeños negocios del sector servicios, no asociados a una labor agrícola: por ejemplo, comercio de proximidad, hostelería, agroturismo, industria, cuidados, enseñanza o actividades profesionales (estudio de arquitectura, asesoría, etc).
Deben instalarse en localidades que estén encuadradas entre los grados uno a cinco de riesgo de despoblación, es decir, en alguno de los 174 municipios de la Comunidad Foral que se encuentran en esta situación y que suponen el 64% del total.
"Buscamos incentivar servicios y la llegada de nuevos habitantes para que vivan en los pueblos"
“El sector primario es el pulmón de la actividad económica en el medio rural, pero necesitamos diversificar y complementarlo con servicios para convertir nuestras zonas rurales en espacios dinámicos y atractivos para vivir, trabajar, relacionarnos o disfrutar del territorio”, ha destacado Aierdi en la presentación de esta línea novedosa, que se ha celebrado este viernes en el salón de actos del departamento.
El 7 de enero en el BON
Está previsto que el BON publique esta convocatoria el martes 7 de enero. A partir de ese momento, las personas interesadas tendrá un mes para concurrir. Esta ayuda directa será abonada en dos pagos de 20.000 euros (el primero, en el último trimestre de 2025; y el segundo, en el primer semestre de 2027).
No requiere ninguna posterior justificación de inversión o gasto, sino confeccionar un plan de viabilidad empresarial y, posteriormente, acreditar la actividad con un mínimo de 12.000 euros de facturación.
EN BREVE
La persona trabajadora autónoma debe confeccionar un plan de viabilidad empresarial; el negocio debe ubicarse en un pueblo en riesgo de despoblación; y no debe haber hecho una actividad similar en los cinco años anteriores. Las subvenciones son por concurrencia competitiva, como mínimo debe obtener 24 puntos de 80.
Primer pago en el último trimestre de 2025: se exige estar dado de alta y pago del IAE; también en el RETA y en el registro de emprendedores.
Segundo pago en el primer semestre de 2027: memoria explicativa del negocio y 12.000 euros de facturación anuales.
Exigencia: el negocio debe prolongarse un máximo de cinco años.
Quién puede acceder: aquellas personas que van a iniciar el negocio después de que haya sido publicada la ayuda en el BON, previsiblemente el 7 de enero.
Aierdi ha estado acompañado del director general de Desarrollo Rural, Rubén Goñi; de la directora de servicio de Diversificación y Desarrollo Rural, Mertxe Rodrigo; y de la jefa de servicio, María Arbeloa.
A esta jornada divulgativa han asistido 50 personas y agentes, entre los grupos de acción local –Cederna/Garalur, Teder, consorcio de Zona Media y Eder, que colaboran en la gestión de la iniciativa-; organizaciones agrarias (UAGN, EHNE y UCAN); entidades formativas y de empleo; equipos técnicos de Intia y representantes de entidades locales, entre otros.
Casi 80 nuevos negocios desde 2016
El programa Ideas que brotan pretende diversificar, generar emprendimiento y complementar la actividad agraria en el medio rural.
Hasta ahora, ofrecía una prima de 20.000 euros para favorecer actividades complementarias derivadas de las propias explotaciones agrarias y otra de 40.000 euros para actividades, también paralelas a la producción agraria, que desarrollaran familiares de los profesionales agrícolas titulares de la explotación.
Ambas líneas se mantienen y el departamento añade otra nueva de 40.000 euros para personas que innovan en el sector terciario en el medio rural. De esta forma, el presupuesto para este programa pasa de tres a cinco millones de euros.
Tres millones siguen para las subvenciones dirigidas a negocios relacionadas con el sector agrario y dos millones para proyectos de servicios ajenos a la agricultura o ganadería.
Desde 2016, un total de 79 personas han creado ya una nueva empresa rural con las ayudas que este programa ofrecía, de las que prácticamente la mitad (45%) son mujeres y otros tantas, jóvenes menores de 40 años. El 72% de las personas perceptoras de estas ayudas han iniciado su actividad en municipios de Navarra con menos de 2.000 habitantes.
Durante el acto de este viernes se ha proyectado un vídeo protagonizado por varias personas emprendedoras que ya se han acogido al programa. Entre ellas, Leire Iribarren, impulsora de un agroturismo; Sandra Gascón, tendera de un pequeño comercio de alimentación; la peluquera Leire Pérez de Iriarte o los monitores de actividades ecológicas en el medio rural Gonzalo Celay y Olite Aribe.