El choque entre Lando Norris y Oscar Piastri en el pasado Gran Premio de Singapur sigue trayendo cola. El británico golpeó al australiano como signo de la tensión que ambos pilotos viven en la lucha por el título de campeón mundial de Fórmula 1. Norris aseguró que no fue un incidente voluntario, sino provocado por su intención de esquivar a Max Verstappen. Para Piastri, la maniobra violó las leyes internas de McLaren. Cabe recordar que ambos monoplazas quedaron dañados sensiblemente, de modo que no supuso una merma para las prestaciones.

Hasta ahora, nadie conocía de manera pública cuáles son esas reglas que el paddock se vienen denominado ‘papaya rules’. Zak Brown ha querido por fin arrojar luz al respecto. El CEO de McLaren ha revelado que las normas de conducta dentro de su escudería se reducen a una: “No tocarse”.

Oscar Piastri y Lando Norris, en el pasado Gran Premio de Singapur. Europa Press

El golpe de Norris a Piastri tiene consecuencias

“Solo hay una norma, que es no tocarse y no sacar al otro de la pista. Es bastante simple. Queremos asegurarnos de que compiten duro pero sin poner en riesgo a ellos y al equipo. Durante la pretemporada anticipamos muchas situaciones. Trabajamos consecuencias para cada situación, en este caso se trata de un incidente pequeño así que la consecuencia también es pequeña”, ha confesado Brown.

Es decir, McLaren concede libertad a sus pilotos para luchar por el campeonato, algo de lo que siempre ha venido presumiendo. Si bien, la libertad termina donde comienza el derecho del compañero, que en este caso es el máximo rival, pues solo 22 puntos separan a Norris del liderato que defiende Piastri.

Las palabras de Brown han revelado por otra parte que la acción de Norris en Singapur ha tenido o tendrá consecuencias. “Se han tomado acciones, decir eso es transparente, pero no hace falta contar todo al resto, igual que no explicamos cuál es nuestro set-up”, ha comentado al respecto antes de retomar el tema de la única norma que existe en el garaje. “Los dos pilotos están en una buena situación y queremos que compitan fuerte. No es fácil tener dos números uno en el equipo. Nos gusta verles competir, pero no queremos que se toquen”, ha ahondado.

"Sería un error no considerar a Max Verstappen en la pelea"

Brown también ha querido alertar a sus pilotos de la presencia de Max Verstappen, que aparece a 63 puntos de la cabeza del campeonato. “Max está en la pelea, sería un gran error no considerar a Max en este Mundial de Pilotos. Vamos carrera a carrera. En este momento Max está demasiado cerca como para relajarnos. Pero nos centramos en este gran premio y queremos acabar primero y segundo este domingo. Este deporte es impredecible, pero ahora mismo vamos a dar a los dos pilotos las mismas oportunidades para los dos pilotos”, ha advertido.

"El riesgo es que suceda como en 2007"

En este sentido, Brown ha rescatado de la memoria lo ocurrido en 2007 entre Fernando Alonso y Lewis Hamilton, quienes acabaron perdiendo al título con McLaren pese a gozar de mayores posibilidades que Kimi Raikkonen, que se alzó campeón en Ferrari asentándose en el liderato tras la última cita del Mundial. “El riesgo es que suceda como en 2007, cuando Kimi ganó por poca ventaja. Pero McLaren corre así. Este deporte es difícil, pero queremos que los dos pilotos tengan su oportunidad y eso conlleva riesgos, como en 2007. Somos conscientes”, ha apuntado.

Cabe recordar que McLaren se alzó con el título del Campeonato del Mundo de Constructores en la pasada cita. Ahora busca atar en el de Pilotos. Las últimas carreras han dado aliento a Verstappen, que ha clasificado por delante de Piastri y Norris en las tres últimas citas. Asimismo, McLaren encadena por primera vez este año tres pruebas sin alcanzar la victoria. Una racha que tratará de detener en el Gran Premio de Estados Unidos que está en disputa.