Una cita complicada

pamplona. Cinco jornadas quedan para terminar la Liga y el Lagunak se está jugando su futuro en la categoría. Mañana tiene un cita complicada, a partir de las 12.00 horas, en Lagunak, ante un Espanyol que es tercero.

El equipo acusa los problemas de las bajas de toda la temporada, pero Rubén Berrogui confía en su equipo. "Tenemos cinco partidos y tenemos que intentar puntuar en las cinco. Sabemos que el más complicado es el de esta semana, en el que nos enfrentamos a un gran Espanyol, que la temporada pasada estuvo a punto de ser campeón de Liga y jugó la final de la Copa. Sabemos que enfrente hay un gran equipo, pero jugamos en casa y, dada nuestra situación, no podemos desperdiciar ningún partido para puntuar", comenta el míster navarro.

Las ausencias de Irene, Tiara, Bastyr y Tamara, hasta hace dos meses, mermaron el potencial del equipo, que intenta recuperarse en la recta final de la Liga. "Ha habido fases en las que hemos jugado con chavalas de 15 años, y han respondido". Por ahora, Berrogui piensa en el calendario que le queda al equipo. "Tenemos que ir partido a partido. Si ganáramos pronto el primero nos iríamos distanciando, pero veo a las jugadoras muy tranquilas. En Lezama el equipo hizo un gran partido, a pesar de estar jugando contra el Athletic". Y añade. "El objetivo que tenemos es claro. Así que no nos queda otra que intentar sumar algo positivo ante el Espanyol o después ganar en Santander, porque es clave".

Para este encuentro, Rubén Berrogi no puede contar con Tamara, que sigue sancionada, y Iosune, que está lesionada. Es dudosa la recuperación de Tiara y María Riesco, que arrastran molestias.

Luis Carrión, entrenador del Espanyol, afirma que "es un equipo que defiende bien y en su casa se muestra más combativo, pero en principio no es uno de los peores rivales. No debemos confiarnos, porque se puede complicar rápidamente la situación", comenta. Están lesionadas las jugadoras Sara Mérida, Carla Cotado y Willy.