pamplona. Osasuna Promesas llega reforzado por sus dos victorias en los derbis navarros ante Tudelano e Izarra. En esta situación tratará de sorprender esta tarde al Barakaldo (17.00 horas).

El equipo navarro no ha conseguido salir todavía de los puestos de descenso, y es consciente de que le viene el calendario complicado. El Barakaldo, quinto en la tabla, es el primer hueso. Lleva nada menos que 15 partidos sin perder y acumulaba nueve sin encajar gol hasta el pasado sábado. "Han cogido una dinámica buena y es un bloque que juega bien a partir del robo de balón. Tiene un grupo muy comprometido y fuerte", comenta el entrenador, Miguel Merino.

La fortaleza del rival a la contra obliga a Osasuna "a ser precisos en el pase y estar muy atentos a su estrategia, porque lo hacen muy bien. Nosotros somos más de juego combinativo, y a lo largo de la temporada hemos tenido altibajos. Estamos sacando más o menos lo de casa y tenemos que seguir fuertes. Ellos nos dejarán el balón y espero que el campo esté bien y que no nos impida jugar a fútbol, que es como nosotros nos sentimos más cómodos".

El filial se ha visto reforzado por las últimas victorias, que le permiten acercarse al puesto de promoción y ve más cerca la permanencia en la categoría. "El equipo está con el ánimo de salir de esa situación. Estamos con moral y con ganas de seguir luchando. Queda mucho por remar todavía y hasta el final de la temporada debemos seguir en la misma dinámica, porque la clasificación está muy igualada".