on un buen calzado, ropa cómoda y una cesta comienza un plan de fin de semana para aquellos fanáticos de las setas y los hongos. Esas joyas tan preciadas que nacen en el Parque Micológico de Ultzama y que sobre todo durante en octubre y noviembre, con la llegada del otoño, comienza la época de recogida y con ello uno de los planes más atractivos para descubrir un valle verde en el que aprender sobre las diferentes especies micológicas comestibles que existen en nuestro entorno más cercano.

El Parque Micológico de Ultzama es una apuesta segura, gracias a su clima y la riqueza de los bosques, para recolectar setas y pasar un fin de semana en la naturaleza. Sin duda, un paraje ideal donde nacen hongos de calidad y en gran cantidad, y además son famosos porque son comestibles. Por ello, los fines de semana el parque organiza rutas guiadas de la mano de profesionales en el que a través de su sabiduría y dando pequeños trucos para identificar los tipos de setas, ayudan a la comunidad científica y a la sociedad en general a pasar un rato inolvidable, aprenden y descubren los rincones más bellos del valle.

Gracias al clima y la riqueza de sus bosques en 2007, y con el fin de proteger el valle, se regularizó la recolección de setas en Ultzama bajo la denominación que hoy conocemos de Parque micológico de Ultzama. Además, el lugar está bien cuidado y se realiza una gran labor ecológica evitando los excesivos pisotones y la recolección masiva de setas, así como de concienciación evitando aglomeraciones y cuidando el medio ambiente.

El Parque Micológico Ultzama cuenta también con un espacio de exposición y un guarda encargado de velar por la seguridad y las buenas prácticas de los recolectores, además de otros servicios, como salidas guiadas y organización de jornadas micológicas. Tal es el la buena atención que en 2008 el Gobierno de Navarra concedió a este espacio natural el V premio de buenas prácticas ambientales a la mejor práctica en desarrollo local sostenible.

Para aquellos amantes de los hongos, los cuales son un delicioso manjar para cocinar y comer de cualquier manera, es importante identificar y conocer cuáles son las más populares y qué debemos de tener en cuenta a la hora de elegirlas. Aquí os dejamos algunos secretos.

Los 5 hongos comestibles más populares

Con la llegada del otoño, son muchos los aficionados a la micología que se acercan hasta el parque de Ultzama a por setas. Pero antes de nada, es importante diferenciar entre aquellas setas comestibles y las venenosas. Es esencial no consumir nunca una seta que no haya sido perfectamente identificada, ya que existe un alto riesgo de intoxicación. No obstante, estas son las cinco setas comestibles más populares que podremos recolectar en el campo.

1. Champiñón silvestre: este tipo de champiñón es una de las setas comestibles más consumidas en Euskadi. Es fácil de identificar ya que tiene un sombrero de color blanco, que en algunos casos tiende hacia un tono grisáceo. En cuanto a su tamaño, varía entre los 3 y los 12 centímetros de diámetro, y tanto su sabor como su olor son muy agradables por lo que sabremos que podremos llevárnoslo a la boca.

2. Boleto comestible: este tipo es también conocido como hongo. Se trata de una seta con un sabor dulce y color blanquecino, aunque a medida que pasa el tiempo tiende a ponerse marrón.

3. Níscalo: por su nombre se os hará familiar puesto que es muy común encontrarla en mercados. Tiene un sabor muy rico y es fácil de identificar porque tiene un sombrero muy característico, de forma convexa y muy carnoso. Tiene sobre unos 15 centímetros de diámetro y es de color naranja con manchas verdes.

4. Trufa negra: no suele ser de las más conocidas en los hogares pero la trufa negra es una seta de color entre marrón y negro, y presenta un aspecto rugoso. Sin embargo, en los fogones de las grandes cocinas tiene un gran valor.

5. Rebozuelo: este es otro de los tipos más fáciles de identificar puesto que su sombrero tiene forma de embudo y un color amarillento. Sus láminas tienen aspecto de pliegue y su sabor es afrutado aunque con un toque amargo.

TRUCOS PARA IDENTIFICAR LAS TÓXICAS

ASPECTO

Si vas al campo y ves una seta con mal aspecto, te da la pista de que no es comestible por lo que no deberás introducirla a tu cesta.

COLOR Y AROMA

Los olores y colores son muy representativos y en el caso de la micología nos permite saber en qué estado se encuentra un hongo. Si su color es rojo, verdoso o anaranjado fuerte, cuidado, puesto que se trata de setas tóxicas.

VELO

Otro de los aspectos a tener en cuenta es el velo; es decir, una tela transparente que puede encontrarse en la zona del tallo o del sombrero. Esto nos indicaría que son setas venenosas.

COLOR DE LAS ESPORAS

Los expertos aconsejan llevar un trozo de papel cuando vayas a recolectar setas. De esta forma, identificarás con facilidad el color de las esporas, ya que si su color es muy oscuro o cuenta con tonos rosados, con seguridad se trataría de un hongo tóxico.