Deportista vasco mejor pagado de todos los tiempos: 525 millones de euros en cuatro años. No tengo capacidad mental para imaginar lo que supone la cantidad por la que ha decidido pasarse a la LIV, o dicho en plata, la competición de golf de Arabia Saudí, que después de arramplar con el fútbol, parece dispuesto a quedarse hasta con Eurovisión, si llega el caso. Alabo su sinceridad al reconocer que el dinero ha sido un motivo fundamental para aceptar la despampanante oferta. Otra cosa es que me chirríe que meta en la justificación al Athletic como ejemplo de lo que es un sentimiento que va más allá del fútbol. Aparte de que hace tiempo que el equipo de mis amores se mueve más por el cash que por la carne de gallina, me suena a excusa innecesaria. No hacen falta las explicaciones. Siempre será un grande