Pamplona - El 25 de septiembre de hace ya una década, Fernando Alonso incrustó su nombre con letras de oro en las páginas del libro de la historia de la Fórmula 1. Tal día como aquel, el piloto asturiano finalizó el Gran Premio de Brasil en la tercera posición y recaudó los puntos necesarios para sellar el primero de sus dos títulos mundiales (el segundo lo conquistó un año después al defender con éxito su corona). Al volante de un Renault, Alonso se proclamó campeón a falta de las dos últimas carreras de la competición, en las que el ovetense volvió a subir al podio: al tercer escalón en el Gran Premio de Japón y al más alto en el de China, la prueba que puso fin al campeonato.
El piloto asturiano ganó el Mundial de 2005 con 133 puntos, muchos menos que los últimos campeones, ya que los sistemas de puntuación actuales y los de aquella temporada son diferentes. Mientras que ahora se otorgan 25, 18, 15, 12, 10, 8, 6, 4, 2 y 1 puntos a los diez primeros monoplazas en cruzar la línea de meta, hace una década todo era más escaso, tanto en lo referente al número de puntos como al de puntuados (10, 8, 6, 5, 4, 3, 2 y 1 puntos para los ocho primeros clasificados). No obstante, la cosecha de Alonso resultó mejor que buena, ya que ganó siete de las 19 carreras en las que participó (Malasia, Baréin, San Marino, Francia, Mónaco, Alemania y China), subió además ocho veces más al podio (en cinco ocasiones al segundo escalón y en otras tres al tercero) y solo dejó de puntuar en tres pruebas: en Canadá, porque se retiró; en Estados Unidos, por una protesta que hizo que 14 de los 20 pilotos del Mundial no compitieran en Indianápolis alegando falta de seguridad de los neumáticos que les proporcionaba la marca Michelin; y en Hungría, donde finalizó undécimo.
Por delante de Raikkonen Fernando Alonso ganó su primer Mundial cuatro años después de su debut oficial en la Fórmula 1. El asturiano firmó su primer contrato profesional con Renault, escudería que en 2001 cedió al ovetense a Minardi, la marca con la que se estrenó. En 2002 regresó a Renault como probador y un año más tarde se hizo con un volante en la escudería francesa, con la que en 2005 y 2006 enlazó dos títulos mundiales. En el primero de ellos, del que ahora se cumplen diez años, Alonso batió a Kimi Raikkonen, que finalizó el campeonato en la segunda posición, con 112 puntos. El finlandés, que por aquel entonces militaba en McLaren Mercedes, también ganó siete carreras aquel año, como el ovetense, pero dejó de puntuar en cinco de ellas y subió al podio tres veces menos que Alonso. La tercera plaza la ocupó Michael Schumacher, con 62 puntos. El alemán de Ferrari, siete veces campeón del mundo, comprobaba que los jóvenes ya le habían adelantado.