sujetar a un adversario es una de las diez faltas que las Reglas de Juego sancionan técnicamente con un libre directo o un penal si la falta se produce dentro del área del equipo infractor.
Todos sabemos lo que significa sujetar a un adversario, pero es conveniente aclarar que la regla considera también como sujetar la acción de extender los brazos para evitar que el adversario adelante o eluda al infractor utilizando las manos, brazos o cuerpo. A esta última acción a menudo y de manera errónea se le llama obstrucción cuando ésta es una palabra que no aparece en las Reglas.
Lo que las reglas sí mencionan como infracción es obstaculizar el avance de un adversario pero ésta se produce sin contacto físico y se sanciona con tiro libre indirecto.
Las cámaras de televisión evidencian muchas veces como los jugadores se sujetan en los saques de esquina y faltas cerca del área, cuando estas situaciones se producen antes de que el balón esté en juego el árbitro debe advertir a los jugadores y amonestarlos si persisten en su actitud, una vez puesto el balón en juego la sanción debe ser de libre directo o penal.
Es conveniente aclarar que si un defensor comienza a sujetar a un adversario fuera del área y continúa sujetándolo dentro de ella, el árbitro concederá un tiro penal.
Se piensa comúnmente que el árbitro debe amonestar siempre a los jugadores que sujetan a un adversario, pero la amonestación solo debe producirse si con esa sujeción se evita que el adversario obtenga el balón o consiga una situación ventajosa, de no ser así no se tomará ninguna medida disciplinaria.
Es suficientemente conocido que se expulsará al jugador que impida una clara oportunidad de gol sujetando a un adversario.
El autor es vocal de Formación y Relaciones Sociales del Comité Navarro de Árbitros de Fútbol.