violencia - Los árbitros pararon el fin de semana 450 partidos del fútbol base y fútbol sala en Baleares, desde las categorías prebenjamines hasta cadetes, como protesta por la riña multitudinaria en la que se vieron involucrados varios padres de futbolistas infantiles de los equipos del Alaró y del Collerense el pasado domingo en Mallorca. El parón, en el minuto tres de cada partido, comenzó el sábado en el campo de la localidad mallorquina de Alaró, donde se registraron los incidentes, con un acto previo al encuentro del equipo local con La Unión, correspondiente a la categoría cadete. - Efe
- Multimedia
- Servicios
- Participación
