Hay coches grandes, grandes coches y, bastantes menos, grandes coches grandes. Representan la grandeza en todo su esplendor y son la viva muestra de que calidad y cantidad pueden ir de la mano para alcanzar el mayor grado de satisfacción y desarrollo tecnológico. Son los buques insignia de las marcas más selectas y los modelos más aspiraciones y deseados por el mercado. En este segmento los alemanes siempre han sido auténticos maestros, las referencias para el resto de las marcas, y Audi, sin ir más lejos, una de las firmas a seguir muy de cerca. Por eso, la renovación, aunque sólo sea una puesta al día de cierto calado, de un modelo tope de gama como es el Audi Q8 constituye todo un acontecimiento.
Audi potencia el atractivo de su SUV cupé tope de gama con innovaciones en diseño, iluminación y equipamiento
La casa germana, según indica, “actualiza el buque insignia de la gama SUV de Audi con un expresivo diseño que realza aún más su elegante y deportiva imagen. La estética exterior se revisa con nuevos faldones delantero y trasero, lo que subraya el carácter del SUV coupé, que ofrece un plus de deportividad gracias al paquete exterior S line de serie. Por primera vez, el Q8 puede equipar faros HD Matrix Led con luz láser Audi, con luces diurnas digitales y la posibilidad de seleccionar entre distintas firmas lumínicas. También se puede elegir entre cuatro diseños de luz para los pilotos traseros, que incluyen tecnología Oled digital”. Estas novedades se complementan con nuevos modelos de llantas de aleación (de 21 a 23 pulgadas de diámetro), los nuevos colores para la carrocería (Oro Sakhir, Azul Ascari y Rojo Chili), nuevas aplicaciones digitales, mayores asistencias a la conducción, molduras decorativas y asientos con costuras en contraste, detalles que realzan el elevado posicionamiento del Q8 entre la gama Q de Audi.
Todo ello asociado a un comportamiento dinámico de primera, que Audi destaca por su “equilibrio, solidez, control, precisión y suavidad, para ofrecer una experiencia de conducción fiable, segura, dinámica y, al mismo tiempo, confortable”, a lo que contribuye especialmente la suspensión neumática adaptativa deportiva de serie, y que se puede completar con la dirección a las cuatro ruedas, opcional salvo para el SQ8 TFSI, que la trae de serie.
Para el capítulo mecánico, Audi juega en una liga superior con sus motores de seis y ocho cilindros en uve. La gama parte del 45 TDI, un diésel de tres litros con 231 CV y 500 Nm que pasa de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos y alcanza los 226 km/h de velocidad máxima; al que sigue el 50 TDI, una variante potenciada de este propulsor hasta los 286 CV y 600 Nm, con un paso 0 a 100 km/h en 6,1 segundos y una punta de 241 km/h. Por su parte, los gasolina 55 TFSI emplean un tres litros de 340 CV y 500 Nm que acelera en 5,6 segundos y llega hasta los 250 km/h (velocidad limitada electrónicamente). Estos tres V6 emplean tracción integral Quattro, cambio automático Tiptronic de ocho marchas e hibridación ligera MHEV.
Pocos modelos en el mercado pueden presumir de combinar a este nivel prestaciones, dinamismo, confort, seguridad, estatus y alta tecnología
Como tope de gama se encuentra el gasolina SQ8, provisto de un ocho cilindros en uve de cuatro litros con 507 CV y 770 Nm, también con tracción Quattro y Tiptronic, para llegar a 100 km/h en 4,1 segundos y también hasta los 250 km/h. Como versión superior, el SQ8 luce un spoiler rediseñado en el faldón delantero, así como un protector de bajos de aspecto deportivo delante y un llamativo difusor en la zaga. Las modificaciones también alcanzan a la parrilla Singleframe -con inserciones verticales en forma de ele y tomas de aire de mayor tamaño con rejillas en forma de panal- y a las terminaciones en aluminio en las carcasas de los retrovisores exteriores, las inserciones de la parrilla y los marcos de las tomas de aire laterales. En un plano más dinámico, las prestaciones del tope de gama se complementan con el tren de rodaje Advance opcional con diferencial deportivo y sistema de estabilización activa electromecánica del balanceo.
Por último, los precios de estos renovados Q8 parten de los 98.495 euros del 45 TDI, seguidos por los 101.995 euros del 50 TDI y los 102.995 euros del 55 TFSI, quedando el SQ8 en 131.995 euros.
