BILBAO. Castiñeira estaba hospitalizado en Katmandú con congelaciones "serias" en las manos, sufridas antes del terremoto. El seísmo lo vivió ingresado en el hospital.

Tras varios días en los que había pedido ser evacuado, al no poder ser atendido bien por haber casos más urgentes, Castiñeira ha llegado esta mañana a Barcelona en un vuelo vía Praga.

A su llegada ha declarado a ETB que se encontraba "bien, dentro de lo que cabe, por fin se acaba". Una ambulancia le ha recogido y le ha trasladado a la clínica de Zaragoza donde trabaja el doctor Ricardo Arregui, el principal médico de España en el tratamiento de congelaciones.

Con varios dedos negros, el montañero ha explicado que los médicos en Nepal le han contado que tendrán que cortarle parte de las yemas, aunque habrá que esperar al diagnóstico de Arregui.