tudela. Al margen de los 2.243 votos que UPN ha perdido y de los 1.873 que no ha cosechado el PSN con respecto a 2011, la Ribera ha revalidado su confianza en ambas fuerzas, con permiso del vuelco que en todos los ayuntamientos ha provocado la irrupción de las agrupaciones independientes, las grandes protagonistas de la cita electoral en la comarca, con 8.183 votos.

Las nuevas opciones dejan en el aire, con distintos grados de incertidumbre, el gobierno de seis localidades: Cascante, Castejón, Cintruénigo, Corella, Tudela y Villafranca; e irrumpen, por primera vez y de forma aplastante, en plazas tan improbables como Fitero, pueblo natal del ministro de Interior y en el que UPN copaba los once sillones consistoriales como único partido. La entrada de cinco ediles de AFI (Agrupacion Fiterana Independiente), con 514 votos frente a los 635 obtenidos por los regionalistas (con un escaso margen de 125 papeletas, da paso a un panorama completamente nuevo, con la marcha de Pachi Yanguas (que llevaba al frente del ayuntamiento doce años), la entrada de Raimundo Aguirre Yanguas como alcalde y la oposición de los cincos ediles liderados por Francisco Javier Fernández Fernández.

Con la misma potencia, los independientes de Alternativa Corellana Independiente (4 concejales), sitúan de nuevo a Corella a las puertas del ya experimentado pacto firmado con PSN (3) en 2003, pero con un cambio en el liderazgo que marcó aquel periodo y que pasaría por que Gorka García Izal tomara las riendas de la ciudad del Alhama. El panorama lo completa UPN, como lista más votada con cinco concejales, es decir que la Alcaldía se la juegan el regionalista Ignacio Arellano o la suma de fuerzas entre la socialista Patricia Cueva y Gorka García. La Asamblea Municipal de Izquierdas-Corella Decide Erabaki (AMI-CDE) obtiene un edil.

En similar situación se encuentra Villafranca, plaza en la que pinchan estrepitosamente los regionalistas de María del Carmen Segura, que tras dos legislaturas al frente del Ayuntamiento pasa de 7 a 5, abriendo la puerta al diálogo y el acuerdo de gobierno entre el PSN liderado por Delia Linzoaín, que mantiene los cuatro ediles de 2011, y la gran sorpresa, la nueva formación AII (2 concejales). De momento, ambos grupos ya han iniciado contactos para arrebatar la Alcaldía a UPN.

El auge de los independientes que-

da también ilustrado en Cortes, donde CIC, la candidatura de César Alba, dobla votos y consigue dos representantes, mientras el PSN, lista más votada y con cuatro ediles, se perfila líder de un futuro gobierno que solo podría desbaratar un pacto entre UPN (3) y la CET (2).

Y en Fustiñana, Agrupación Fustiñana de Izquierdas (AFI) consigue representación en su primera concurrencia a las urnas, metiendo en el Consistorio a Jose Manuel Santacruz García. En esta localidad, los resultados hacen que se resienta notablemente UPN, cuyo candidato, Juan Antonio Sola lleva ejerciendo como alcalde 24 años y, aunque pierde un concejal, logra enfrentarse a las tres décadas en el poder, a dos ediles de distancia de los socialistas.

Entre todos estos casos de cambio, es sin duda alguna reseñable el de Castejón, emblema de la fortaleza socialista, donde el PSN pierde por primera vez en democracia la Alcaldía con un desgaste de votos (dos concejales menos) que favorece a UPN (que obtiene 5), pero abre el melón de las conversaciones entre IU (3), PSN (2) y, de nuevo, una fuerza independiente, UPSC-KHBS (1), que es la que tiene en la mano la llave de la gobernabilidad con su edil Faustino Malo.

Y, como bandera absolutamente representativa del poder de los independientes en estas elecciones se encuentra Ablitas. El SIA, surgido de los escindidos del PSN y liderado por Cecilo Antón, barre a propios y extraños obteniendo 8 concejales (el 64,6% de los votos) frente a los 3 de UPN; y revalida la confianza que los ciudadanos les otorgaron hace cuatro años.

Otro caso de llaves en manos de fuerzas de reciente creación, es del de Cascante, donde la pérdida de papeletas del PSN (de 5 a 4 concejales) parece haber desembocado en las manos de la Candidatura de Izquierdas de Cascante (CIC), que encabeza José Antonio Roncal. En su mano (con dos ediles) puede estar la gobernabilidad del municipio en favor del socialista Julián Berruete o, en su defecto, de la lista más votada, la de Alberto Añón Jiménez (5 concejales).

afianzamiento al alza No se pue-

de obviar, en el análisis del resultado de las urnas en la Ribera, el afianzamiento de fuerzas ya situadas en el poder durante la última legislatura. Arguedas y Murchante no solo vuelven a otorgar su confianza a los equipos de los socialistas Fernando Mendoza y Tomás Aguado, respectivamente, sino que aumentan el apoyo a ambos gestores con un concejal más, en el primer caso, y tres en el segundo con casi el doble de los votos.

También Ablitas repite organigrama y secunda a Cecilio Antón (SIA) con dos concejales más (de 6 a 8); y Cabanillas suscribe la labor de Alberto Santos (PSN) dándole de nuevo la Alcaldía y un concejal más (de 5 a 6), en detrimento de la lista de Román Alonso (UPN), que pasa de 3 a 2.

En cuanto a la respuesta de los votantes de Cintruénigo, Raquel Garbayo (la única de UPN que sube votos en la Ribera y sube de 5 a 6 concejales) podrá repetir como alcaldesa si Iniciativa Ciudadana Cirbonera (ICC) le presta su apoyo, tal y como hizo en la pasada legislatura cuando su edil ocupó el cargo de concejal de Festejos. Sin embargo, tampoco está cerrada la puerta para el PSN porque María Pilar Sarasa podría ser primera edil si consigue el respaldo de ICC y de la Agrupación Popular Cirbonera (APC).

Y en Ribaforada, a expensas de lo que ocurra decida la asamblea que la agrupación del PSN celebra este sábado 30 para definir las líneas de la próxima legislatura, el electorado de la localidad ribera ha reconocido la buena marcha del pacto que los socialistas y Geroa Bai suscribieron en 2011 para gobernar el Ayuntamiento. Los primeros, que han logrado un concejal más y pasan a cinco representantes consistoriales, tienen la posibilidad de renovar su liderazgo en solitario gracias a la amplia mayoría otorgada por las urnas (de 667 a 859 votos), aunque su líder y actual alcalde, Jesús María Rodríguez, apuntó que “no cierro la puerta a ninguna posibilidad, incluso a la de gobernar en solitario”, y anunció que “esta semana iniciaremos conversaciones con todos los grupos”.

los casi inamovibles En otras plazas en las que no cambia el poder, pero es muy llamativa la comparativa de cifras con los comicios anteriores, se encuentra Buñuel, donde José Antonio Lasheras (UPN) recoge el testigo de la Alcaldía de su sucesor, Joaquín Portolés, con el mismo número de concejales, 6. Sin embargo, el PSN cosecha un ascenso de apoyos que le aúpa a 5 concejales (2 más que en 2011).

Inamovible se presenta el panorama en Cadreita y el mano a mano entre regionalistas y socialistas, que, aunque descienden ligeramente en votos, calcan los resultados de la última cita electoral con 6 y 5 ediles, respectivamente, lo que revalida a Berta Pejenaute en la Alcaldía y a Raquel Ros como portavoz de la oposición.

Casi feudo de Andrés Agorreta (alcalde por el PSN desde 1999), Fontellas sigue en la línea de otorgar, sin apenas variaciones, cuatro concejales a los socialistas, dos a UPN y uno al PPN, dibujando la misma realidad cita tras cita con las urnas. Algo parecido ocurre en Milagro, municipio de mínimas distancias entre los regionalistas de la candidatura de Yolanda Ibáñez (6) y los socialistas de José Luis Arasti (5). De la misma forma ha resuelto la cábala el electorado de Monteagudo en favor de Mariano Herrero (que repite 5 con UPN) y de Elías Jiménez (que revalida 4 con el PSN).

Finalmente, Valtierra apuesta con 6 ediles por María Victoria Montori (PSN) y matiza su carácter socialista apoyando con 2 a la Candidatura Progresista (CPV) que encabeza Carolina Aznárez. UPN recoge los votos de PPN y CDN (que no han concurrido en esta ocasión) y obtiene 3 ediles.

en cifras

16.508

l Votos de UPN. Se han contabilizado en las 20 localidades contabilizadas (sin incluir a Barillas y Tulebras). En los comicios anteriores (2011), los regionalistas obtuvieron un total de 18.751; y cuatro años antes (2007), alcanzaron los 23.896.

12.811

l Votos de PSN. Son los emitidos en estas elecciones en la Ribera, frente a los 14.684 de 2011; y los 19.378 que consiguieron los socialistas en los comicios de 2007.

8.183

l Listas independientes. Unas de reciente creación y otras ya asentadas, irrumpen con fuerza en la comarca y, en numerosos casos, poseen la llave de la gobernabilidad.

abstención

23,7%

l No votantes. El porcentaje es ligeramente superior al registrado en las elecciones de 2011, cuando la abstención ascendió a un 20,6% del censo.