La precipitación privó a Tudela de su procesión

Como poco y sin profundizar, de precipitada, de poco acertada y de errónea se puede considerar la decisión de varias cofradías de no salir en la procesión del viernes, al menos desde mi punto de vista. Es cierto que no todas demostraron esta precipitación pues tengo entendido que la votación quedó en un apretado seis a cuatro a favor de no salir y por lo tanto de suspender la procesión de Viernes Santo y así privar a los tudelanos de esta tradición.

Quizás al no estar muy metido en ese mundo, mi opinión adolece de fallos, es trivial o no tiene en cuenta algunos aspectos claves para entender esta determinación pero como tudelano de a pie, la decisión me pareció un despropósito.

Y considero que fue precipitada porque se tomó 45 minutos antes de la hora prevista de salida.

Considero que fue precipitada y falta de consideración porque se tomó cuando dos de las cofradías caminaban hacia la Catedral. Cofradías que tuvieron que votar móvil en mano 45 minutos antes de la hora de salida. Y cofradías a las que se les dijo que podían volverse ya que se iba a suspender pero que meritoriamente se negaron y llegaron a la Catedral de todos modos e incluso una de ellas, realizó la exaltación allí mismo ante los aplausos del público, que no entendía esta suspensión.

Y precipitada porque las previsiones meteorológicas más pesimistas auguraban que dejaría de chispear, de caer 4 gotas o de llover mínimamente antes de las 20.50 horas. Previsiones que no fallaron porque a las 20.30 horas dejó de llover y ya no lo volvió a hacerlo.

Desde mi ignorancia supina de este mundo, no entiendo por qué no se espero a los hermanos mayores de las cofradías que estaban en camino y que para la 20.00 horas estaban ya en la puerta de la Catedral, para decidir todos juntos.

Desde mi poco entender no entiendo por qué no se esperó, como en otras ciudades, a tomar la decisión 5 minutos antes de la hora o incluso a que la procesión saliera con retraso pero saliera.

Tampoco entiendo por qué varios Pasos o Monumentos no estaban en la Catedral en el momento de la decisión final puesto que al tener que llegar a ella, andando y cayendo esas cuatro gotas, votaron que no se saliera de manera apresurada y apremiante.

En definitiva que esta decisión, para mi errónea, hizo que los tudelanos nos quedásemos sin procesión aun sin saber el motivo concreto y mientras veíamos un cielo sin apenas nubes y gozáramos de una temperatura envidiable a la hora prevista de salida. Más aún, esta precipitada decisión nos hurtó a los tudelanos las exaltaciones de tambores y bombos de algunas cofradías que ensayan desde el otoño solamente para obsequiarnos con ellas este día.

Y finalmente, a mi modo de ver, esta decisión poco acertada demuestra que Tudela a veces es diferente pero para mal y que hay que darle una vuelta a estas decisiones tan trascendentales ante de tomarlas de manera tan precoz.

Para terminar y como me hizo ver un amigo, aún menos entendí que con el miedo a que cayeran chuzos de punta que se tenía a las ocho de la noche, para las 21.30 horas tres o cuatro cofradías ya hubieran retirado los Pasos de la Catedral y otras estuvieran a punto de hacerlo, dando la razón a los que pensábamos que con esperar un poco, la situación “de riesgo” se hubiera salvado y la procesión hubiera salido.