Por una Tafalla saludable

cerca de 300 escolares de los colegios de Tafalla y de agrupaciones deportivas de la ciudad participaron el jueves en una Jornada de Sensibilización en Hábitos Saludables que organizaron la Comisión de Juventud, el Patronato de Deportes y la ludoteca local Txikilandia, con la colaboración del grupo de monitores de Tafallix. La jornada, que sirvió para cerrar el curso escolar en materia deportiva, contó con la colaboración del Gobierno de Navarra y la asociación de comerciantes Ascota.

El encuentro lúdico y festivo reunió a niños y jóvenes de 6 a 16 años que realizaron diferentes exhibiciones deportivas, bailes y juegos en la plaza de Navarra durante más de dos horas. Según señalaron los organizadores, “el objetivo prioritario de la convocatoria es sensibilizar a niños y jóvenes sobre las ventajas de ocupar el tiempo libre en prácticas deportivas y rechazar el consumo de sustancias que pueden resultar perjudiciales para la salud”. Las actividades se desarrollan en la plaza de Navarra para que las puedan presenciar un mayor número de personas y sirven también para demostrar la diversidad de actividades en las que los más jóvenes pueden participar en el deporte escolar o en cualquiera de los muchos clubes deportivos que funcionan en Tafalla

La zona norte de la plaza, más cercana a la fuente, se reservó para los niños y niñas del Club Balonmano Tafalla y el Club de Atletismo; y en la zona sur, junto a las terrazas de los bares, actuaron la Escuela de Deporte Municipal, la Escuela de Patinaje, el Club Makotxa de gimnasia rítmica, el Club de Danza Acrobática y el grupo Street Dance, que realizaron demostraciones de bailes urbanos y de hip-hop. Varios grupos de dantzaris txikis bailaron danzas regionales. Un nutrido grupo de jóvenes aprendices de la Escuela de Ajedrez y los más pequeños tuvieron oportunidad de participar en juegos, dibujos y talleres coordinados por el grupo de monitores del campamento urbano Tafallix y la ludoteca Txikilandia. Al finalizar todas las actividades, a cada uno de los txikis se les entregó un tique canjeable por piezas de fruta y botellines de agua, refrescos y zumos, a modo de merienda saludable.