lakuntza - La furgoneta de Mila Kolore ya ha echado a andar, blanca por fuera pero llena de color por dentro. Y es que tiene como objetivo mejorar la movilidad de las personas con discapacidad de esta asociación, una veintena de niños, jóvenes y adultos de Sakana. “Ofrece la posibilidad de poder viajar nueve personas, con dos plazas adaptadas con plataforma para sillas de ruedas. Además el habitáculo permite acceder a todos los ocupantes para atender sus demandas durante el viaje”, explica Virginia Ruiz de Eguino, presidenta de esta asociación. Ha sido posible gracias a la donación de 49.000 euros de Sakana Group, fundación de Lakuntza que cuenta con 235 trabajadores. “Sakana Group es una cooperativa, con una política social enfocada principalmente a fomentar la cultura, el deporte y mejorar las condiciones de vida del entorno del valle”, apuntan desde el grupo. “Históricamente los socios de Sakana han estado muy sensibilizados e involucrados con todos los temas que conciernen a esta zona, colaborando en proyectos muy diversos”, añaden.

Pero la furgoneta de Mila Kolore ha sido uno de los proyectos más especiales, como destacan. “El Consejo Social no dudó ni un momento y así lo trasladó al colectivo, que aplaudió su propuesta”, explican. “Al colectivo de Sakana nos produce una gran satisfacción poder colaborar con el magnífico equipo que diariamente trabaja para hacer posible que estos chavales tengan una ocupación y se preparen para el futuro”.

El vehículo se quedó pequeño hace unos días, cuando todos y todas querían montarse en el primer viaje destino Lakuntza para agradecer a esta cooperativa su donación. Al final se decidió hacer dos viajes. “Supuso la viabilidad de la compra de la furgoneta. Fue la guinda a todo el trabajo realizado desde Lakuntza por y para la asociación”, recuerda Ruiz de Eguino.

Y es que con este mismo objetivo, Mila Kolore organizó el pasado octubre su día, una fiesta de la diversidad y la solidaridad, después de que un grupo de vecinos y vecinas ofrecieran a esta asociación la posibilidad de celebrarla aprovechando la actuación de Motxila 21 por la tarde. Así, se puso en marcha un auzolan que preparó un variado programa y diferentes recursos para recaudar fondos, como una tómbola en la que sortearon 1.500 premios, una muestra de la implicación de comercios, empresas y entidades.

“Desde Mila Kolore, nuestros familiares con discapacidad y sus familias agradecemos a todos los trabajadores de Sakana la financiación de la furgoneta. Tampoco olvidamos todas las aportaciones tanto económicas como personales que hemos recibido en torno al día Mila Kolore”, observa Ruiz de Eguino. “Permiten mantener este vehículo adaptado y apoyar las actividades que se desarrollan en la asociación”.

No en vano, con la furgoneta se van a poder realizar diferentes actividades de la asociación que exijan desplazamiento, tanto para terapias como para actividades de ocio. Así facilitará acudir a celebraciones y fiestas en Sakana o los fines de semana a la granja escuela Gure Sustraia en Ollo. También a Goldaratz la semana de vacaciones, entre otras.

Precisamente, Mila Kolore se creó en 2009 de la mano de un grupo de padres y madres con el propósito de fomentar la autonomía, la vida social y el ocio de las personas con capacidades especiales de Sakana, una atención social que no existía en la comarca.

En la actualidad cuenta con un centenar de socios y socias. Así, desde sus inicios han llevado diferentes actividades de ocio, al tiempo que les ha dado visibilidad. “Después de 10 años de recorrido, para mí la asociación es un camino y una forma de estar en la vida. No es un camino elegido del todo libremente dado que soy madre de una joven con discapacidad intelectual”, apunta.

Ruiz de Eguino recuerda que los comienzos fueron difíciles, el tránsito de pasar de la aceptación personal de un familiar con discapacidad a exteriorizar y luchar por las personas con discapacidad de Sakana. “Fue un inicio con muchas cuestas arriba pero con zonas de descanso donde empezaron a servir de bastón muchas personas muy humanas, las familias de las personas con discapacidad, coordinadores, voluntarios, la gente de los pueblos de Sakana, los ayuntamientos, la Mancomunidad de Sakana, empresas?”, enumera sin querer olvidar a nadie. “De esa forma fuimos llegando a caminos en llano y muchas veces cuesta abajo”.

Al respecto, pone el foco en la gran labor que realizan los voluntarios y voluntarias, medio centenar, encantadas de compartir parte de su tiempo libre con estas personales especiales. Y es que aseguran que reciben más de lo que dan. “Los voluntarios y voluntarias llamaron a la asociación Mila Kolore, la transición de un inicio gris y a veces negro a los mil colores de las diferencias y capacidades de nuestros familiares”, incide la presidenta. “Son la gasolina de la asociación con su acompañamiento, su amistad, su entrega e ilusión”. Y el motor de Mila Kolore son Izaskun, Nora, Rosa, Manuela, Edurne, Maitane, Ana María, Naira, David, Aimar, Josu, Lizar, Oier, Mikel, Alex, Youseff, Aratz, Iker y José, unas personas especiales.