artajona - Una nueva iniciativa de la Asociación Aitakaio movilizó el pasado fin de semana a los vecinos de Artajona, quienes colaboraron en la reforestación de su monte. Ni el frío ni la lluvia impidieron que un grupo de más de 85 voluntarios participaran en la plantación de 1.000 árboles en la Fuente de Los Caños, el lugar afectado por el terrible incendio que arrasó con el bosque de esa zona en el verano de 2016.
El 25 de agosto de aquel año se produjo un fuego que arrasó 3.538 hectáreas en las localidades de Añorbe, Artajona, Barásoain, Garínoain, Pueyo y Tafalla. En concreto, aquel incidente supuso la pérdida de gran parte del bosque de Artajona, de más de 500 hectáreas.
“La asociación nació a raíz de aquello para poder recuperar nuestro monte porque a nivel humano ha sido tremendamente duro para muchos vecinos el perder ese bosque”, relató Fernando Catalán Jaso, uno de los precursores de Aitakaio.
Las labores de los vecinos arrojan la esperanza de que el lugar atizado por el fuego vuelva convertirse en lo que era antes de que las llamas lo destruyeran. Los árboles que se plantaron son 400 quejigos, 400 carrascas, 100 pacharanes, 25 cornejos, 25 almendros, 25 nogales y 25 aligustres.
Durante la jornada se contó con un monitor ambiental que hizo varias actividades para los más pequeños, quienes también aprendieron de la iniciativa y formaron parte del proyecto de reforestación.
Cabe destacar que esta plantación está integrada dentro del proyecto integral de recuperación de la zona y cuenta con apoyo económico de Gobierno de Navarra para cubrir el coste material de la plantación, dentro de las ayudas de educación ambiental, voluntariado ambiental, ciencia ciudadana y custodia del territorio.
la asociación Aitakaio nació con tres fines, buscar la pronta recuperación del bosque, educar en valores medioambientales y vigilar a las distintas instituciones y administraciones para que no descuiden la zona afectada. “A lo largo de este tiempo hemos hecho varias iniciativas y esta plantación engloba los objetivos que tenemos como asociación”, concretó Catalán. En la actualidad, Aitakaio se alza como un instrumento educativo no solo como una asociación que quiere devolver el monte a la localidad. “El motivo por el que nacimos está más lejos pero seguimos apostando por la naturaleza y por ello seguiremos fomentando los valores medioambientales”, expresó el organizador del proyecto en el municipio.