l txupinazo ayer en Sanduzelai se antojaba especial. No por ser el primero en lanzarse en tiempos de pandemia, que también, porque aunque abrió la veda para la celebración de las fiestas en los barrios, fue la primera vez que aquí se inauguraban desde un balcón. Y la fiesta, como la mecha, consiguió prender en todos y cada uno de los balcones de Sanduzelai, engalanados para la ocasión, e incluso se retransmitió en directo. Prueba superada.

La vecina Maider Vicente, de la coordinadora cultural del barrio, fue la encargada de inaugurar unas fiestas que se recibieron con los brazos abiertos, con decenas de vecinos que las esperaban con ganas, sin confinamiento que valga. "Este año sabemos que ninguno de los actos programados va a quedar suspendido por la climatología", bromearon Vicente y el gaitero Óscar García, que leyeron un emotivo pregón en el que recordaron al vecino Antonio Salinas, recientemente fallecido, y a las personas a las que se ha llevado la pandemia y sus familiares. "El confinamiento ha vaciado nuestras calles y plazas, pero como somos un barrio que siempre nos hemos crecido ante la adversidad, no vamos a dejar que este bicho nos deje sin fiestas. Ahora más que nunca es importante que el barrio esté unido, aunque sea desde los balcones", señalaron, haciendo hincapié en el tejido asociativo, el pequeño comercio, la juventud y la diversidad cultural.

Hubo baile de la era con altavoces, aplausos y techno gaua para abrir boca. "Van a ser unas fiestas diferentes pero lo importante es que se van a celebrar, vamos a participar todos, y seguro que no las olvidamos nunca", señalaba emocionad la anfitriona. La fiesta seguirá hoy desde los balcones con Dianas a las 10.00 horas, gigantada txiki desde Sandu Vision -el canal de YouTube con el que cuenta el barrio para interconectar a los vecinos, todo un éxito-, balkoipote con alguna sorpresa y hasta calderetes.

"Hemos vivido la preparación de las fiestas con ilusión, lo malo de ser los primeros es que te puede pillar el toro -bromeaba ayer Ayerra, de 27 años-. Pero ha sido bonito pensar en todo lo que podíamos hacer desde los balcones, y esperamos que se cumpla. Estamos como si las fuéramos a vivir en la calle, con los nervios típicos del primer día", confesaba. Lo que más va a echar de menos "es el poder estar con la gente. El pote en la peña, las txoznas y pasar el día en la calle hasta que el cuerpo aguante. Pero van a ser unas fiestas diferentes y únicas, las vamos a recordar siempre".

Desde la comisión de fiestas, Maider Ayerra destacaba también que han participado muchos vecinos, sobre todo jóvenes. "Ha habido mucha implicación, la participación de la gente ha sido lo más bonito. La sensación de comunidad ha sido enorme, hay un sentimiento de unión muy fuerte", confesaba.

Han realizado un vídeo para anunciar las fiestas con unas 70 personas que ha cosechado más de 2.000 visitas en Instagram, y están desarrollando la aplicación Sanduquiz con preguntas sobre el barrio. "Al principio fue raro organizarlo todo desde los balcones, nos daba pena, pero luego todo el mundo se ha volcado".