- "Ya nos gustaría que la ciudadanía se acordase más del txistu el resto del año y no solo en estas fechas", señala Patxi Rodríguez el presidente de la Asociación de Txistularis de Iruñea. El colectivo no celebrará el tradicional alarde que celebran por San Fermín. La actuación se ha sustituido por un concierto que tendrá lugar el 6 de septiembre en la Ciudadela con las medidas de seguridad pertinentes de ese momento. "El txistu, al contrario de lo que la gente cree, no es tan fácil, es un instrumento de grado superior. Nosotros no solo estamos en Sanfermines, también hay un montón de actividades y conciertos el resto del año", expone Patxi.

Desde principios de año tocan en conciertos por fechas de carnaval, Navidades o Semana Santa, entre otras. El txistu también está presente en el espíritu de la asociación Garaikideak que se encarga de promover la semana de la música contemporánea. Sin embargo sus citas más importantes son el Alarde Txiki el 21 junio en la plaza del Ayuntamiento para conmemorar el Día Internacional de la Música, y el solsticio de verano y el Alarde de San Fermín en la plaza San José.

Recientemente se ha creado EMAN, Escena Musical Asociada de Navarra, un conjunto de grupos pertenecientes a las artes escénicas y la música del que la Asociación de Txistularis de Navarra forma parte. "Es otra forma de crecer. Nos hemos juntado para poder hacer más peso con nuestras propuestas", subraya Aitor Urquiza, director del Alarde de este año.

El txistu no está presente en otros países, forma parte de nuestra cultura, por lo que "si los de aquí no lo cuidamos, se perderá", revela Aitor. Este instrumento lleva más de 500 años entre nosotros, "desaparecer no, pero otra cosa es que cada uno acabe tocándolo en su casa o con los amigos, y que se pierda el potencial real que tiene", agregan. Para estos profesores, la música del txistu, su repertorio y composiciones se ha adaptado a los nuevos modos de vida de la sociedad con el paso del tiempo. Asimismo hay que tener en cuenta la diferencia entre el txistu académico o el rural que paralelamente han coexistido y han evolucionado. "El repertorio del txistulari también ha ido cambiando según las modas y la música que se escuchaba. Estamos obligados a renovarnos, porque si no te adaptas, muere", subraya Alfonso Iturria, profesor de txistu en Joaquín Maya.

Los músicos suelen decir que el txistu tiene una realidad poliédrica, "porque tiene más caras que nunca, como las tradicionales que hay que conservar", detalla Alfonso, que añade la necesidad de mantener el folklore como tradición. "Antiguamente no hacía falta, era nuestra vivencia", reitera Aitor. "Queremos que la gente vea y sea consciente de que el txistu es mucho más que lo que se escucha en fiestas y que acompaña a las danzas tradicionales", agrega Patxi.

A causa del confinamiento el concierto del Alarde Txiki se transformó en un vídeo en el que participaron todos los niños y niñas. En estos momentos la asociación ha presentado varias propuestas al Ayuntamiento de Pamplona como "un entretenimiento para que la gente disfrute. El Ayuntamiento nos apoya, de hecho es un poco el organizador. Fue todo rodado, al ver que San Fermín se suspendió empezamos a reprogramar las actuaciones con nuevas obras y composiciones", explica Patxi. Esta ha sido la tercera vez en la historia que ha tocado aplazar un alarde de txistularis de Pamplona. La primera fue por la muerte de Germán Rodríguez en los sucesos ocurridos en los Sanfermines de 1978. La segunda vez se cancelaron por la muerte del concejal de Ermua, Miguel Ángel Blanco en 1997, y esta tercera ha sido a causa del coronavirus. Todas las citas se pospusieron y ésta también. "Siempre se busca una alternativa, intentamos hacer los alardes como se pueda y cuando nos dejen, pero que siga vivo", señala Arkaitz Ibarra.