u pasión por las monedas hizo que el estellés Ricardo Ros quisiera realizar a las fiestas de Estella-Lizarra un pequeño homenaje en su segundo año consecutivo sin celebrarse. Y así arrancó el Viernes de Gigantes colgando en su grupo de Facebook, Monedas de Navarra, los tres maravedís, una de la últimas monedas realizadas en Navarra allá por 1825 y que tiene como emblema al famoso rey Felón, Fernando VII para los libros de historia o Fernando III, en esa otra historia no del todo escrita de los reyes de Navarra.

Para el sábado de la Bajadica, eligió una moneda de un maravedí de 1773. El domingo de la procesión, la Pañuelada y las danzas en las plaza de los Fueros propuso un real de oro de los últimos reyes de Navarra, Catalina de Foix y Juan de Albret. Para el lunes colgó un óbolo de García el Restaurador que reinó Navarra desde 1134 a 1150. La moneda de Sancho VII el Fuerte para el martes y el miércoles un medio real Fernando el Católico -el Usurpador-. Finalmente, hoy jueves como último día de fiesta Ros habrá colgado un dinero de Juana I de navarra, "una moneda única".

"Pensé que se podía animar el grupo proponiendo una moneda para cada día de fiestas y así lo he ido haciendo para que la gente conozca que Navarra durante cerca de mil años tuvo moneda propia y que se hable del tema", comentó Ricardo Ros, un ingeniero industrial cuya pasión por los materiales hizo que transformara su vocación hacia la joyería. Tras su jubilación Ros tuvo claro que tenía que ordenar su colección de monedas. Una afición que comenzó cuando mirando una cuantas monedas en casa de su padre en Abárzuza se encontró con una pieza antigua de tres maravedís: aquella moneda no tenía nada que ver con las ochenas de la República o de Franco, databa de 1833 y fue el comienzo de una amistad que todavía hoy perdura medio siglo después. Un periodo en el que Ricardo no solo ha ido atesorando monedas navarras sino que también le ha permitido ahondar en su conocimiento. Fruto de ello fue la publicación en 2013 del Catálogo general de la moneda de Navarra, un trabajo de investigación desarrollado durante más de 40 años en torno a la moneda navarra. En este volumen, Ros repasó la historia de Navarra a través de su moneda. Una obra que recoge las primeras piezas numismáticas fabricadas: desde las primeras vasconas del siglo II antes de Cristo hasta las últimas que datan de 1837. Material que sigue creciendo: "sigo ampliando y corrigiendo el catálogo ya que desde la publicación del libro he incorporado muchas monedas aunque, de momento, no tengo intención de reeditarlo".

Para Ricardo Ros la moneda es uno los vestigios que más pueden aportar sobre la historia. "No hay nada más navarro que las monedas que existen de Navarra". En este sentido Ros agradeció la apertura en el Museo de Navarra de una sección que recoge parte de la colección de este material que durante años estuvo escondido en cajas sin que el público pudiera verlo. "Nadie nos ha educado en este tesoro de Navarra".

Para Ros, la historia de las monedas en Navarra se divide en tres partes. Por un lado la ibero-vascona que es anterior y coetánea al imperio romano, la medieval que iría desde comienzos del milenio hasta la ocupación por Castilla. Tras ésta, aparecería una tercera fase en la que Navarra siguió emitiendo moneda, bajo la tutela de Madrid, "eran frecuentes las peleas por la denominación de los reyes".

Para el coleccionista estellés hay un campo que tiene una historia propia que es la moneda que se siguió emitiendo en la Baja Navarra en Donibane Garazi y Saint Palais, donde, incluso tras la incorporación de Navarra a Francia, en las monedas siguió apareciendo la denominación de cada monarca como rey de Francia y de Navarra "hasta 1789 en que la Revolución Francesa acabó con la monarquía". Además de las poblaciones de la Baja Navarra, en este lado del Pirineo existieron varias poblaciones donde se acuñó moneda: Nájera, Monreal, Pamplona y Estella. En esta última localidad todavía se conserva el edifico llamado Casa de la Moneda que era uno de los palacios de los reyes de Navarra en la ciudad. Ros señaló a Teobaldo I, Teobaldo II, Enrique I, Juana I o Carlos III como algunos de los reyes que tenían sus cuños y batieron monedas en la ciudad del Ega, "aunque no queda ni un troquel de aquella actividad".

Para Ricardo Ros hay muchos misterios en torno a la historia de la moneda: "han desaparecido algunos ejemplares muy significativos como la moneda que recogía al rey Navarro García III con la marca de Aragón "algo que indicaría que fue rey de este reino". "Pese a que todo indica que la primeras monedas de la historia de los reinos cristianos se hicieron en Navarra, últimamente se están encargando de indicar que eso no fue así y que pudieron hacerlo antes otros reinos menos importantes como el de León o Aragón", indicó Ros, quien subrayó que la primera moneda conocida con el escudo de Navarra fue emitida por Carlos III, el Noble, a finales del siglo XIV.

La no celebración de las fiestas que precisamente hubieran acabado hoy jueves, ha traído como grata consecuencia que uno de sus vecinos haya hecho pública la importancia que las monedas tuvieron en Navarra, "uno de los estados más importantes de Europa hasta su ocupación en el siglo XVI".