Tejados ajardinados y árboles en las azoteas de edificios. Este el proyecto piloto que la mayoría municipal del Ayuntamiento de Pamplona quiere poner en marcha como una forma de colaborar en la estrategia contra el cambio climático y la eficiencia energética.
La iniciativa ha sido debatido en la Comisión de Urbanismo celebrada este miércoles tras una propuesta presentada por EH Bildu. Ha salido adelante con el voto añadido de PSN y Geroa Bai, mientras que Navarra Suma se ha abstenido.
La declaración consta de dos puntos. En el primero se insta al equipo de Gobierno "a que estudie la posibilidad de reconvertir la cubierta actual de alguno de los edificios públicos de la ciudad en una cubierta vegetal, como proyecto piloto, a poder ser, en el marco de un Plan de Renaturalización de la ciudad".
El segundo punto plantea la opción "de crear un programa de ayudas para las instalaciones de cubiertas vegetales en edificios de titularidad privada en suelo urbano consolidado".
La presentación de la iniciativa ha corrido a cargo de Borja Izaguirre, que ha recordado que las cubiertas ajardinadas son habituales en muchas capitales europeas.
Entre sus ventajas ha citado la mejora del comportamiento energético del edificio, el aumento de superficies de espacios vegetales de la ciudad, la mejora de la calidad del aire por retención de partículas y la reducción de la contaminación acústica, a la vez que ayudan a mitigar la isla de calor urbana.
"Esta quinta fachada, como se denomina, da respuestas a los desafíos relativos a la sostenibilidad, el cambio climático, las energías renovables, la autosuficiencia y mejora de la calidad ambiental de la ciudad" ha señalado el edil de Bildu.
En su conclusión ha mencionado los acuerdos suscritos por el Ayuntamiento de Pamplona para alcanzar la sostenibilidad energética y ha solicitado un estudio de las posibilidades que ofrece Pamplona, con el recordatorio de que no todos los edificios tienen la capacidad de soportar espacios ajardinados en sus azoteas.
El representante de Navarra Suma Fermín Alonso ha dedicado la mayor parte de su intervención a quitar mérito a la iniciativa de Bildu, con el argumento de que no es nueva en Pamplona.
Así, ha citado el caso de la escuela infantil Printzearen Harresi en la Milagrosa, que desde hace 10 años tiene una cubierta ajardinada, y el futuro Civivox que se construirá en el solar de Salesianos, que también contará con un instalación de estas características.
Por parte del grupo municipal socialista ha intervenido Federico Colmenar, que ha apoyado la propuesta de Bildu al entender que resultará positivo para la ciudad conocer cuántos edificios públicos están en disposición de acoger zonas ajardinadas en sus tejados.
También ha comentado que estos dispositivos aumentan el valor de los edificios, aunque también ha aludido a la cuestión del mantenimiento, más exigente en el caso de los jardines intensivos que en los extensivos.
El último en intervenir ha sido el representante de Geroa Bai Javier Leoz, que también ha respaldado la propuesta y ha planteado la conveniencia de que pudiera ampliarse a edificios privados.
La instalación de jardines y espacios arbolados en las azoteas es común en muchas urbes. Se basa en un sistema artificial que ofrece un espacio verde natural, creado por la adición de plantas a un medio de cultivo compuesto por capas que cumplen distintas funciones, como irrigación, drenaje y barrera para las raíces.
Se instala en los tejados de edificios, que quedan parcial o totalmente cubiertos de vegetación, ya sea en un suelo o en un medio de cultivo apropiado, utilizando tecnologías que mejoran el hábitat o ahorran el consumo de energía.
