El Ayuntamiento de San Adrián, en el pleno celebrado recientemente, aprobó por unanimidad dos modificaciones presupuestarias por valor de 200.000 euros con las que pretenden hacer frente a los daños ocasionados por la riadade diciembre que dejó calles, viviendas y edificios públicos totalmente anegados.

De acuerdo con el alcalde, Emilio Cigudosa, la primera de las partidas, dotada con 100.000 euros, irá destinada a ir abonando las facturas que están surgiendo de los arreglos de los desperfectos ocasionados en los inmuebles tales como el Consistorio, la casa de cultura o el colegio; además de los ascensores, calderas, puertas y pintura, en el centro educativo, por ejemplo, cabe recordar que la zona más dañada fue la del sótano, que es donde estaba la biblioteca, el armario de comunicación, la ludoteca y la sala de ordenadores, así como el pabellón, donde el agua subió hasta los 2,5 metros.

Por otro lado, los otros 100.000 euros servirán para adecentar toda la maquinaria que tenían en almacenes o bajeras y que se estropeó.

El Consistorio, de esta forma, adelantará los pagos de las actuaciones más urgentes pero, eso sí, tal y como recalca el alcalde, “espero y deseo que después haya un retorno”.

En la actualidad, especifica, los servicios municipales se prestan sin problemas salvo en el caso de la oficina de la Mancomunidad de Montejurra, que aún no ha sido posible que lo haga.

Arreglo de motas

El Ayuntamiento decidió, tras dicha riada y por cuenta propia, arreglar las dos roturas en las motas del Ega y el Ebro algo que, finaliza el alcalde, “hizo que hace apenas diez días, con las nueva avenida, el agua no volviera a entrar al pueblo”