Los grupos de EH Bildu, PSN y Geroa Bai en el Ayuntamiento de Pamplona han reclamado este jueves repetir la adjudicación de espacios de venta ambulante "al haberse detectado discriminación en el reparto". Ha pedido que se anule la subasta y se siga un proceso que "asegure la igualdad de oportunidades y la libre concurrencia".

Los tres grupos han presentado una iniciativa que será debatida en la Comisión de Presidencia del próximo martes pidiendo que se anule la adjudicación y se siga un proceso que “asegure la igualdad de oportunidades y la libre concurrencia”.

La propuesta ha surgido tras conocer que el Ayuntamiento ha adjudicado los espacios mejor situados, en Taconera y Recoletas, de forma directa y arbitraria; algo que los vendedores y las vendedoras consideran “un abuso, una burla, una estafa y una ilegalidad”.

En un comunicado emitido este jueves de forma conjunta, los grupos de la oposición han indicado que desde hace 25 años los vendedores ambulantes en las fiestas de San Fermín han participado en el procedimiento de adjudicación a través de una subasta-concurso basado en un condicionamiento que regula y exige unos requisitos muy específicos.

Los vendedores explican que deben “cumplir escrupulosamente esas exigencias y pujar en el plazo estipulado”, es decir, “siguiendo el procedimiento exacto que se les plantea desde el Ayuntamiento”.

Sin embargo, añaden los tres grupos, el problema ha surgido cuando “los vendedores, habiendo seguido el pliego de condiciones, se han enterado de que el Ayuntamiento ha adjudicado de forma directa a los puestos que estaban en la plaza de San Nicolás”.

Para las formaciones progresistas, “esto demuestra, una vez más, la actitud unilateral del equipo de Gobierno, liderado por Navarra Suma, que prefiere beneficiar a unos en contra de otros, y, por ello, recortar derechos de aquellas personas que llevan tanto tiempo participando en nuestras fiestas”.

Según EH Bildu, PSN y Geroa Bai, “este es un año muy importante para los vendedores y las vendedoras, ya que vuelven tras sufrir todos los problemas de la pandemia y las pérdidas económicas que esta ha provocado. Ahora, unido a esto, se les exige, desde el Ayuntamiento, que para estar en la Plaza de Recoletas coloquen una caseta especial que no poseen y que puede tener un alto coste”.

Los grupos firmantes han criticado “esta forma de actuar”, debido a “que el reparto realizado ha producido una clara discriminación para las personas interesadas”. Según han señalado, la única solución viable que ven es “anular la subasta realizada de forma injusta, repetir el proceso desde el comienzo y que, en el nuevo que se convoque, se siga la igualdad de oportunidades y la libre concurrencia para todos los vendedores ambulantes que quieran participar”, lo que pedirán en la próxima comisión de presidencia.

En la comisión de Presidencia de este martes, la concejala socialista Cecilia Ulzurrun se hizo eco de las quejas de los vendedores y preguntó por los criterios que ha seguido el Ayuntamiento para la adjudicación. El concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu, reconoció que el Ayuntamiento se había reservado cuatro puestos que correspondían a los cuatro puestos que se instalaban en la plaza de San Nicolás.

Añadió que “se les ofertó venir aquí (Taconera y Recoletas), y la oferta que se les hizo es que eligiesen los puestos y en función de eso se les dio ese puesto en compensación por quitarles de San Nicolás”.

Mañana viernes, a las 9 horas, se celebrará en el área de Seguridad Ciudadana la elección de los puestos para Taconera y Recoletas por orden de puntuación. El plazo de presentación de las ofertas terminó el pasado 27 de mayo y se han llegado a pagar 5.000 euros.

Malestar de los vendedores

El malestar entre los vendedores resulta evidente. Una de las vendedoras, Liliana Tello señaló ayer que “llevo una inversión bastante considerable en artículos de San Fermín que el ayuntamiento me está haciendo perder por sus malas decisiones ya que el sitio por el cual había ofertado está adjudicado”.

César Alva, por su parte, indicó que “los vendedores tradicionales de San Fermín exigimos que se cumpla el pliego de condiciones que regula esta actividad con rigor ya que de lo contrario no cogeremos los situados que nos digan ellos o los que sobren, y procederemos a tomar acciones legales. Entendemos que esto es un abuso, una burla, un atropello y una arbitrariedad”.

Juan Carlos Astudillo considera que no se ha tratado a todos igual y que es una desigualdad “que unos paguen tanto y otros poco, con un pliego absolutamente injusto e incorrecto, un pliego de condiciones abusivas y desproporcionadas”.G.V.S

. que lleva 25 años viviendo a Pamplona, dijo que “me considero parte de la fiesta y el Ayuntamiento está acabando con ese sentimiento con tanta desigualdad”.

I.L.G. dijo que “los vendedores ambulantes estamos cansados de tanto abuso y atropellos. Ahora nos exigen una caseta que vale 1.300 euros el alquiler”.