El acuerdo del Pleno del Ayuntamiento de Lekunberri de abandonar el Consorcio Aguas del Manantial Ercilla, integrado también por cinco concejos de Larraun: Iribas, Alli, Etxarri, Mugiro y Arruitz; no ha gustado en la otra parte, que apuesta por esta entidad para abastecer el agua en alta. “Los próximos días nuestros técnicos analizarán la documentación enviada por el Ayuntamiento de Lekunberri, después de habernos enterado por la prensa de su decisión. Se valorarán las posibles consecuencias económicas y la posible afección que generaría al servicio total”, señala Camino Garralda, alcaldesa de Iribas y a su vez presidenta de esta entidad. “El Consorcio tiene las concesiones de agua y es el que gestiona todas las infraestructuras para dar el servicio en alta. Por eso, actuará con responsabilidad para no generar problemas en el abastecimiento”, destaca.

Garralda, por otro lado, recuerda que el pasado diciembre se cambió la presidencia después de ocho meses en manos de Lekunberri. Asimismo, cuestiona las cifras que maneja este Ayuntamiento. “En 1994 vivíamos en los cinco concejos 320 personas y no 700-800 como dice el alcalde. ¿Por qué falta a la verdad? El porcentaje de votos lo negoció el alcalde de entonces, José Mari Aierdi, y no ha habido ningún problema hasta esta legislatura”, sostiene. Asimismo, habla de “nula apuesta por el diálogo para la resolución de los problemas” y de retos a abordar a corto plazo.

“Está el sobredimensionamiento de los gastos de servicios. Según diferentes estudios, estos últimos años nos podríamos haber ahorrado unos 300.000 euros por la gestión de la planta de tratamiento”, observa. Asimismo, señala que “en 2020, después de varios juicios con el Ayuntamiento de Lekunberri, se reconoció la competencia del consorcio para su gestión pero a día de hoy, no hemos recibido el traspaso”. Además, afirma que “todo el agua que va al depósito industrial que utilizan Agro-Zumos y Zumos EVA, no repercute en los gastos que se generan en el Consorcio por los bombeos a los que nos obliga al resto de entidades consorciadas. Es un tema que hay que solucionar ya”.

INFORMES

Garralda destaca el papel del Gobierno de Navarra. “Como parte que es, realiza sus aportaciones. La legislatura pasada realizó un informe jurídico validando el funcionamiento del Consorcio para gestionar las subvenciones. Asimismo, actualizó las cuentas para trabajar de forma más eficiente y la Cámara de Comptos auditó el Consorcio y lo vio como una herramienta válida para la gestión de agua en alta”, incide.

Comptos también les recomendó actualizar los estatutos y establecer de forma clara todos los gastos computables y los criterios entre los consorciados. “Cuando los concejos hemos intentado realizar estas recomendaciones, el alcalde de Lekunberri se ha mostrado contrario y ha bloqueado cualquier forma de continuidad”, asegura, al tiempo que muestra su apuesta y la de las entidades consorciadas “por la mejoría del servicio, por el acuerdo y la convivencia entre las diferentes partes”.

Lekunberri

Mancomunidad. El Ayuntamiento de Lekunberri considera que el Consorcio “no se ajusta a la legalidad vigente” y aboga por una nueva figura jurídica. “El servicio de agua está garantizado”, asegura el alcalde, Gorka Azpiroz.

Gastos. También argumenta que “la mayor parte de los gastos corrientes, en torno al 70% y el 80% de las inversiones, corren a cargo de Lekunberri pero el reparto de votos es al 50%”; y la deuda existente, “unos 50.000 euros a cierre de cuentas de 2022”.