No hay novedades sobre las manchas halladas en la campa del Santo Sepulcro de Estella, pero sí han producido diferencias en el equipo de Gobierno. Mientras desde la concejalía de Medio Ambiente se evitaba hablar ayer del tema, “estamos recabando toda la información posible de la afección ambiental”; finalizaron que no había información nueva que ofrecer.
Por su parte, el concejal de Servicios, Jorge Crespo, insistió en la gravedad del tema “nos desmarcamos de las afirmaciones y la gestión que está haciendo EH Bildu”. Crespo afirmó que se deberían “pedir explicaciones” al PSN (partido que gobernaba Estella en la demolición de Curtinova), junto con el proyecto de derrumbe de la fábrica, donde han aparecido los dos depósitos con fueloil. También aseguró que deberían limpiar la zona y que, tendrían que solicitar “un informe riguroso que determine la dimensión del impacto medioambiental y las consecuencias para la salud de los vecinos que ha originado”.
Las manchas han despertado un gran debate entre los vecinos y vecinas del barrio. Algunos aseguraron ayer que los depósitos eran de hormigón, y que también enterraron los “bombos” que eran los depósitos de madera donde se mezclaban todos los productos químicos de las fábrica de curtidos”, señaló uno vecino que trabajó en ella 22 años.
A la espera de más novedades, los trabajos de limpieza de los dos depósitos de fueloil encontrados en las antiguas instalaciones de Curtinova en la campa del Santo Sepulcro. Con todo, ayer no se realizaron los trabajos de extracción de tierra afectada, valorados en más de 20.000 euros por el concejal de Servicios, Jorge Crespo.
