Un año más, la gran fiestas de la brujería navarra tendrá su cita en Bargota en su XVII edición. El pueblo del personaje emblemático de Johanes sigue animando a vecinos y vecinas de la localidad a trabajar duro para vestirse de medieval y para hacer que las calles y entradas se conviertan en antiguas de rúas de finales del siglo XV y comienzos del XVI, época en la que vivió este brujo. 

Una fiesta que renació el año pasado tras las dos ausencias por las restricciones de la pandemia y en la que se ha trabajado “muy bien, yo diría que como siempre porque ya sabemos lo qué tenemos que hacer cada uno”, aseguró la alcaldesa de Bargota, Cristina Remírez, quien se mostró contenta por la programación que se ofrecerá entre el 14 y el 18 de julio. 

Así, el mismo viernes comenzará la fiesta con pasacalles y la degustación de migas y sopas de ajo. Un comienzo gastronómico al que seguirá la fiesta Sorgingaua que comenzara ya el año pasado.

 El sábado se abrirán ya todos los rincones preparados, con animación del grupo de teatro Garañango y la batucada Goraño que será una previa a la gran cena de la brujería que se celebrará por la noche y en la que todos los asistentes estarán ataviados para la ocasión. 

El domingo será el gran mercado en el que decenas de puestos de artesanía y productos de cercanía de Tierra Estella, se instalarán en las calles de Bargota y donde los asistentes podrán visitar los rincones brujeriles. Este año con una novedad ya que en la decoración y como un juego con premio, se meterá un gazapo en la decoración que los visitantes tendrán que adivinar. También se recreará la persecución de Juan Lobo por los arcabuceros de Torralba del Río y se podrán ver las exposiciones ‘La medicina y la peste en la Edad Media’ e ‘Instrumentos de tortura y máquinas de pena capital’. 

El lunes habrá pruebas en una nueva edición de El Conquistador de la Brujería y, por la tarde, se realizará la visita teatralizada de Don Estanislao y Ceferino, además de la actuación de la clown Virginia Imaz. 

El cierre de la brujería será el martes 18 con una ruta por las bodegas de Bargota, una población que posee decenas de estas estancias en los bajos de sus casas que, junto a sus cepas viejas, son uno de los tesoros mejor guardados de la localidad.