Más de 150 alumnos, padres y profesores del colegio público Huertas Mayores de Tudela se han concentrado este mediodía para reclamar una cubierta para el patio y un “protocolo de actuaciones ante altas temperaturas en el interior del edificio” ya que en las aulas que dan al patio superan fácilmente los 27 grados (temperatura marcada por Riesgos Laborales como límite). La concentración se ha llevado a cabo detrás de una pancarta en la que se podía leer “Cubierta ya. Nuestro alumnado importa” y lo acompañaban pequeños carteles que sujetaban alumnos y alumnas en los que se pedían “queremos salir al patio”, “si llueve no hay patio”, “aulas a 34 grados”, “necesitamos una cubierta” o “me aso con Lorenzo”, mientras gritaban “¡O nos asamos o nos mojamos!”. Como explicó la directora del centro, Paqui Vega, que ha encabezado la protesta, “cada vez que suben las temperaturas no se puede estar en el patio. No hay ni un solo sitio que haga sombra para que puedan estar”. Esa es la gran incoherencia de un centro construido inaugurado en 2009, bajo un gobierno de UPN, que presenta numerosas deficiencias y algunas de ellas es que los niños, durante más de la mitad de los meses del año, no pueden salir al patio (por excesivo calor o por lluvia de la que no se pueden proteger) ni usar el gimnasio, un verdadero horno para un centro que cuenta con más de 500 alumnos. Unas condiciones que el cambio climático solo va a agravar. De hecho, según los registros que realizan, y que han dado a conocer al departamento de Educación, de los 175 días lectivos que tiene el curso en 50 días en 2021 y 52 días en 2022 las temperaturas superan los 30 grados en las aulas y en el patio, a lo que hay que añadir los días de lluvia que impiden salir al patio.
“Nos están volviendo locos entre el Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento. Yo no soy política, no sé de quién es la responsabilidad, solo pido una cubierta que es lo que necesita el centro”, ha señalado Paqui Vega, directora del colegio Huertas Mayores.
La desesperación se veía en el rostro de la directora que ha señalado que hasta el pasado mes de octubre “he estado enviando al Gobierno de Navarra fotos de las aulas a 32 grados, las que dan al patio. Por toda respuesta me dicen que es el centro más moderno de Tudela y que cuentan ‘con unas prestaciones térmicas mejores que muchos de los edificios anteriores construidos en Tudela y en zonas semejantes’, que aplique ‘estrategias de ventilación’, ¿Qué cree que estamos haciendo? Si fuera estamos a 40 grados y abres las cortinas, lo que entra es calor. Les dejemos que usen botellas de agua para que vayan bebiendo. Hay unas cortinas que usamos y que hace que las clases estén a oscuras”, decía desesperada. “Ya no sé qué hacer. Hemos llegado hasta aquí porque no sabemos qué hacer”. Desde hace más de 4 años Ayuntamiento y Gobierno de Navarra se pasan la pelota de la responsabilidad de la obra.
Vega ya ha anunciado que van a seguir con protestas hasta que consigan lo que buscan: que les hagan caso, les escuchen y les den una solución para poder cubrir 1.000 metros cuadrados de patio para que los niños puedan jugar en el recreo y usar un patio infrautilizado. “Voy a pedir una reunión con Educación y con el Ayuntamiento, pero lo que quiero es que vengan aquí a verlo. El gimnasio es muy pequeño y es imposible meter a más de 500 alumnos ahí”. Vega recuerda que "cuando las temperaturas son altas en el exterior, de mayo a octubre, las aulas que dan al patio tienen temperaturas muy altas, influyendo en el rendimiento, del alumnado provocando mareos, malestar y mucho cansancio". La responsable del centro ha señalado que las movilizaciones continuarán "en función de las respuestas que nos den".
El colegio se inauguró en 2009 y en 2017 ya se tuvo que ampliar. Además durante todo el año operarios del Ayuntamiento arreglan goteras en pasillos y en el gimnasio, “pienso que hay partes que no están bien construidas. No es normal que haya goteras, cada vez que llueve aparecen”.
En la lectura del comunicado a los padres que acudieron a la concentración del patio, Vega ha señalado que el acuerdo programático del actual Gobierno foral señala en su punto 8 “impulsar un plan estratégico de infraestructuras educativas teniendo en cuenta el diseño de los nuevos patios escolares hacia un modelo inclusivo y paritario”, además de recordar que entre las prioridades del Plan Director de Infraestructuras Educativas aparece “mejora y optimización de los espacios: patios cubiertos...”.
“Ya no sé qué hacer. Hemos llegado hasta aquí porque no sabemos qué hacer”.
Para el Gobierno de Navarra “al tratarse de inversiones en bienes de su propiedad que no responden a ampliaciones del centro por necesidades de escolarización que sí son ejecutadas por el departamento de Educación”. El departamento recuerda, en su contestación, que de esa forma han actuado otros ayuntamientos como el de Pamplona, en numerosos colegios “el último en junio de 2022 en el colegio de Ermitagaña”.
Por su parte, los técnicos del Ayuntamiento de Tudela indican que “las obligaciones municipales sobe los centros docentes se limita a conservación, mantenimiento y vigilancia de los edificios de titularidad local destinados a centros públicos de educación”. Por lo tanto aseveran que no existe una “delegación expresa de competencias del Gobierno de Navarra a favor del Ayuntamiento para que éste realice actividades complementarias en los centros docentes”. De hecho en aquel año 2019, Educación aprobó una concesión de subvención directa al Ayuntamiento de Tudela para poder financiar las obras de construcción de la cubierta del colegio Elvira España, en base a una partida nominativa que ascendía a 200.000 euros.
