En un pleno municipal marcado por la controversia, PSN y UPN unieron fuerzas el pasado jueves 30 de mayo para aprobar el alquiler de una plaza de toros portátil durante las fiestas de Olite-Erriberri, que se desarrollarán del 13 al 19 de septiembre. Esta decisión abre la puerta al regreso de los festejos taurinos con muerte, siempre y cuando haya un empresario dispuesto a asumir los costos y se disponga del presupuesto necesario.
La medida ha generado tensión entre los socios de gobierno, Agrupemos y PSN, quienes sostienen la Alcaldía de la localidad. Las diferencias quedaron en evidencia durante la sesión plenaria del pasado jueves, donde el asunto fue discutido después de haber sido planteado en la comisión de Festejos presidida por el PSN.
El pleno contó con la ausencia notable de la socialista Mª Carmen Real y la edil del PP Eva Mª Gorri, situación que obligó al concejal del PSN, Jorge Bacaicoa, a desempatar la votación con un resultado de 4-4 entre Agrupemos y UPN, lo que permitió la aprobación del alquiler del coso taurino.
El alcalde, Josu Etxarri (Agrupemos) expresó sus dudas sobre la viabilidad del proyecto, subrayando que el Ayuntamiento solo se encargará de los costos de montaje y desmontaje de la plaza. Etxarri también cuestionó la posibilidad de que algún empresario esté dispuesto a financiar un programa de festejos taurinos y “una infraestructura costosa para una plaza de cuarta categoría con un aforo de 2.000 personas, dado el escaso interés que suelen generar estos eventos. Creo que en esta ciudad, en vez de dar un paso adelante, estamos dando dos pasos hacia atrás”. Ángel Guerrero (Agrupemos) también se pronunció sobre el tema: “Votamos en contra no por la fiesta de los toros en sí, sino que votamos en contra de la tortura”.
Javier Elarre, de UPN, se defendía alegando que “cuando hay un espectáculo bueno, la gente se mueve. Aquí ocurre como con las verbenas. Cuando hay una mala la gente no acude”.
Más mociones
En la misma sesión, se debatió una moción de UPN que rechazaba los "ataques" a la tauromaquia por parte del Gobierno de Sánchez. En este caso, Agrupemos y PSN votaron juntos (4-1), lo que impidió que la moción prosperara. De manera similar, ambas fuerzas políticas se alinearon para rechazar otra moción de los regionalistas sobre las urgencias y las listas de espera en la sanidad.
