Cientos de personas acudieron el domingo a la concentración de protesta convocada en Bera para pedir unos “servicios sanitarios dignos”. El alcalde Aitor Elexpuru recordaba que “desde el 21 de julio tenemos solamente dos médicos en Bortziriak, en un valle de 8.500 habitantes”. Exigen “soluciones definitivas, no parches en la atención sanitaria, la salud es un derecho y no se juega con ella”.
Recordaba también "que la situación no es nueva, hace dos años ya hicimos varias movilizaciones" y "gracias a la implicación de las trabajadoras del Centro de Salud, más o menos se mejoró la situación pero ahora se ha llegado a una situación límite".
Actualmente, hay una médico en Lesaka y otra en Bera, las cuales tienen que hacer frente a urgencias y visitas domiciliarias. Los consultorios de Igantzi, Arantza y Etxalar se han quedado sin médicos y están funcionando gracias a la presencia de enfermeras que aumentan su carga de trabajo. Asegura el alcalde que "esta situación no es anecdótica, es estructural y ha empeorado en los últimos meses. Las bajas no son sustituidas, las cubre el personal de noche y hace las guardias, aumentando su carga de trabajo".
Informaron también que "hay plazas vacantes sin cubrir, una desde febrero de 2024 y otra desde junio de este año por una jubilación y parece que a corto plazo no se cubrirán estas vacantes". En la protesta también pidieron "condiciones dignas de trabajo para las trabajadoras".
Adelantaron que el próximo jueves 7 de agosto, trabajadoras sanitarias junto con los alcaldes de Bortziriak se reunirán en Pamplona con el consejero de Salud del Gobierno de Navarra para tratar el tema y lanzan un mensaje claro "mientras no se solucione el problema, seguiremos con las movilizaciones".