Los grupos municipales de EH Bildu y Geroa Bai en el Ayuntamiento de Villava han censurado en sendos comunicados la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, que confirmó la sentencia que considera que el escudo con las siete provincias y el término Euskal Herria situado en el frontón municipal supone un “posicionamiento en favor de una determinada posición política” que vulnera el deber de neutralidad política exigible a los poderes públicos. Y obliga al Consistorio a borrar el citado escudo.

Para la coalición abertzale, que lidera el Ayuntamiento con mayoría absoluta, la sentencia “no se corresponde con la voluntad mayoritaria de la ciudadanía de nuestra villa (y no es la primera vez que un tribunal actúa de dicha manera). El juego de la pelota vasca, que cuenta con una especial raigambre en los siete territorios históricos de Euskal Herria, forma parte de los usos y costumbres de nuestro pueblo. Y constituye una parte importante de nuestro acervo cultural y deportivo. Nuestra tradición y sus expresiones pasadas, actuales y futuras no debe ser determinadas en instancias judiciales” lamentan.

Y afirman que “desde EH Bildu seguiremos impulsando con determinación nuestros sentimientos y nuestra cultura”.

Interpretación “tendenciosa y restrictiva”

Por su parte, Atarrabia Geroa Bai considera que el TSJN hace una interpretación “tendenciosa y restrictiva tanto del término Euskal Herria como del símbolo que representa –el escudo– esa expresión, confiriéndole un contenido político, que es lo que reprocha al propio Ayuntamiento por su decisión de pintar ese emblema en la parte alta del frontón”.

Geroa Bai recuerda que “Euskaltzaindia, la Academia de la Lengua Vasca, emitió ya hace años un informe en el que reseñaba que desde hace siglos existe un empleo generalizado de la denominación Euskal Herria para designar un territorio con rasgos culturales bien definidos, por encima de fronteras político-administrativas y por encima también de las diferencias históricas".

Geroa Bai apunta que “Euskaltzaindia, en el mencionado informe, reitera la propiedad, corrección e idoneidad del nombre Euskal Herria para el conjunto de las siete provincias o territorios, nombre no asimilable ni equivalente a cualesquiera de las realidades político-administrativas. Al mismo tiempo, recuerda la necesidad de respetar una tradición secular que nada ni nadie puede interrumpir o tergiversar”.

La coalición destaca que “la primera referencia a Euskal Herria aparece en un manuscrito en euskera del alavés Juan Pérez de Lazarraga, entre 1564 y 1567, y sólo unos años más tarde consta en la traducción al euskera del Nuevo Testamento del labortano Joanes Leizarraga, de 1571. Si el término es apropiado, correcto e idóneo a decir de Euskaltzaindia, máxima autoridad al respecto, también lo es, lógicamente, su elemento visual, el escudo, que no es sino la representación gráfica de esa expresión”, concluye.

“Quizás debiéramos preguntarnos” –apunta irónicamente Geroa Bai– “si la labor y los informes de la propia Academia de la Lengua son cuestionables también para el Tribunal”. “Si algún advenedizo lo plantea en los tribunales, igual llegamos a esa situación”, finaliza la coalición.