La Organicopa, cuando acabamos de pasar el ecuador de la misma, se consolida en sus buenos resultados de manera generalizada en las tres entidades de la zona media.

En Mairaga, es Garinoain la que mejores resultados está cosechando, siguiendole los talones, con muy poco margen, Murillo del Fruto, Santacara y Mélida. Cierran la clasificación Barasoain, Beire y Caparroso. En esta entidad no hay grandes diferencias entre las localidades y cualquier esfuerzo en la separación de la orgánica puede cambiar claramente esta clasificación que pica para arriba en la cantidad captada en relación al año 2020.

En Ribera Alta, capitanea la clasificación en porcentaje de subida desde que comenzó la competición el 3 de mayo, Falces seguido muy de cerca de Azagra, San Adrián, Marcilla y Peralta. La subida media en peso de orgánica captada en la mancomunidad, en su conjunto, desde que comenzó el campeonato, se sitúa en el 14%. Cierran la clasificación Cadreita y Villafranca, pero estando en poco más que la mitad de la competición, hay tiempo para mejorar estos resultados.

En Valdizarbe se destaca Obanos en primera posición con varios pueblos que pelean por quitarle el trono como son Berbinzana (una de las gratas sorpresas de esta edición de la organicopa), Mendigorría o Puente la Reina Gares. El nivel de todas las localidades es alto y el porcentaje de subida, en relación a estas mismas semanas en 2020 es del 25%. La lucha por ser la localidad campeona, sigue abierta.

Las tres entidades están haciendo grandes esfuerzos en incentivar a sus respectivas localidades por medio de revistas, radios y televisiones locales, por lo que el final de esta organicopa promete emociones.