El Centro Integrado Politécnico celebró el viernes un acto de graduación a los aproximadamente 130 alumnos y alumnas de los cursos superiores del centro. Así, se reconoció el paso por el Politécnico a los estudiantes pertenecientes a nueve de los once grupos del centro que terminan 2º curso de ciclos. Los alumnos y alumnas fueron obsequiados con un diploma.

El acto de graduación tuvo lugar en la sala principal del Espacio Cultural Los Llanos, un acto que contó con la presencia del alcalde de Estella-Lizarra, Koldo Leoz, y de otros invitados, como el vicepresidente de Laseme, Rogelio Andueza, la gerente de esta entidad, María Luisa Elguea, así como el vicedirector del CI Politécnico, Luis Javier García de Eulate, el jefe de estudios, Martín Azpilicueta, y la jefa del departamento de Administración, Camino Iturgaiz. No pudo acudir el director del centro, Antonio Díaz, por encontrarse en Valencia en el primer Congreso Internacional de la FP y También en el Encuentro de Centros Integrados de España. A la cita también asistieron 125 familiares del alumnado, así como el personal del centro que pudo, ya que la actividad se realizó por la mañana y había clases en el resto de grupos.

El acto de entrega de los diplomas contó con varias actuaciones, como la de danza contemporánea que ofreció la alumna de 2º de Gestión Administrativa Olaia Zábal. Por su parte, el estudiante de este mismo curso yciclo, Ander Etxarri bailó un aurresku en el escenario del Espacio Cultural Los Llanos.

Al acto siguió después en las instalaciones del CI Politécnico un aperitivo que se encargaron de preparar los y las estudiantes de 1º y 2º de FP Básica de Cocina y Restauración. Estos alumnos y alumna llevaron a cabo los pinchos que se pudieron degustar y también se encargaron de servirlos. Por su parte, los y las estudiantes de 1º del ciclo de Guía, Información y Asistencias Turísticas se ocuparon de organizar el acto de graduación, con todo el protocolo e infraestructura necesaria para el mismo.

El objetivo de realizar esta fiesta de graduación fue, por una parte, acercar a las familias al centro y por otra poder disfrutar de un día de convivencia. Por último, se trató de fomentar que los ciclos de turismo y cocina pudieran realizar prácticas reales.