Domingo Llauró recibió de manos del Ayuntamiento de Estella-Lizarra un reconocimiento que sirvió de acto de entrega del título de hijo adoptivo de la ciudad justo el día en que cumplía sus 92 años. “Estoy emocionado sí, pero yo lo que he hecho es lo que tenia que hacer. Todas las fotos, las recopilaciones y todo lo que he hecho es porque me apetecía y no creo que tenga más importancia” afirmó ayer Llauró. Con todo, el título de hijo adoptivo ya fue refrendado oficialmente en el pleno del mes de diciembre de 2020 y ayer se materializó se entrega postergada por la pandemia, en la escuela de música Julián Romano. Un acto que inició el alcalde, Koldo Leoz, quien destacó su figura de hombre involucrado “todo quien conoce a Domingo valora su trabajo de recopilación de fotos y crónicas, pero es también una persona muy querida”. Destacó el interés de Llauró por la actividad política y su vinculación con los plenos de la ciudad “ha tenido que venir una pandemia mundial para impedir que no pudiera ir a los plenos”, bromeó.

Detrás del nombramiento está su concienzuda labor de retratista de la sociedad estellesa y la anotación minuciosa de buena parte de los acontecimientos de la Vieja Lizarra: “ha fotografiado 60 años de historia de la ciudad, convirtiéndose en el cronista de un periodo sin duda trascendente de la historia de Estella-Lizarra” valoraron su contribución desde el Consistorio.

A Joaquín Ansorena le correspondió la tarea de narrar la tarea ingente de su labor como los 105 volúmenes de las historia de Estella recopilados por Llauró a los que habría que añadir un sinfín de actividades, “has hecho la radiografía de tu ciudad por todos los ángulos posibles”. Con este nombramiento Llauró forma parte de un reducido listado en el que figuran nombres destacados como Blanca Cañas, Jerónima Uriarte y Gustavo de Maeztu. Al acto no podía faltar sus compañeros de la rondalla Los Estellicas, que pusieron en marcha la iniciativa y al frente de los cuales se encontraba su presidente, Jesús Gastón.