El tradicional encierrillo y encierro en fiestas de Estella-Lizarra se han desarrollado este lunes sin incidentes graves, registrándose únicamente un traumatismo leve y una abrasión también leve entre los participantes. A pesar de la buena noticia en materia de seguridad, la jornada ha estado marcada por una escasa participación de corredores, una imagen que ha contrastado con la alta afluencia registrada durante el fin de semana con la presencia de vacas en lugar de novillos.
Un tema que abre el debate de que ha desaparecido la tradición de las vaquillas, con las que los vecinos y vecinas permanecían en gran numero en los distintos puntos del recorrido, y la actual realidad que presenta las calles vacías de corredores y de público, ya que buena parte de él permanecía dentro del recorrido del encierro.
Este cambio en la dinámica de participación ha despertado la reflexión entre veteranos y nuevas generaciones sobre el rumbo que están tomando las celebraciones, y sobre si es posible recuperar elementos que fomenten una mayor implicación vecinal y mantengan vivas las costumbres que históricamente han dado sentido a estas fiestas.
Domingo festivo con ambiente activo y baja conflictividad
El domingo, tercer día de las fiestas, transcurrió con un ambiente animado y una participación ciudadana constante, en una jornada que, si bien presentó algunos incidentes puntuales, se desarrolló con relativa tranquilidad en comparación con los días anteriores.
El dispositivo de seguridad estuvo compuesto por un total de 79 agentes desplegados por diferentes zonas del recinto festivo, lo que permitió una actuación rápida ante los pocos incidentes registrados. Entre las intervenciones policiales, se destacan la detención de una persona, una denuncia por robo con fuerza y otra por violencia de género. Asimismo, se cursaron ocho denuncias de tráfico por infracciones a la Ley de Seguridad Vial.
En cuanto a los controles preventivos, se realizaron 146 pruebas de alcoholemia a conductores, sin que ninguna arrojara resultados positivos. Este dato ha sido valorado de forma muy positiva por las autoridades, que han destacado el comportamiento responsable de la ciudadanía al volante durante esta jornada.
Por su parte, los servicios sanitarios atendieron a 17 personas por diversos motivos. Cuatro de ellas resultaron heridas por traumatismos durante los encierros, mientras que otras dos requirieron atención en las barracas. También se registraron tres casos de agresiones, tres asistencias por causas no especificadas y cinco traumatismos adicionales en distintas zonas del recinto.
En resumen, la jornada dominical dejó un balance favorable en materia de seguridad y salud pública, con una baja incidencia en controles de alcohol y una actividad contenida tanto para los cuerpos policiales como para los servicios médicos, todo en un contexto de alta participación y ambiente festivo.