Más de mil personas identificadas por participar en botellones o incumplir las normas sanitarias es el balance de las actuaciones policiales que han tenido lugar estos días en Pamplona, donde el problema de las aglomeraciones en algunos espacios y en momentos puntuales ha centrado la mayoría de las intervenciones.

En previsión de que se produjera un incremento de visitantes pese a la suspensión de los Sanfermines, el Ayuntamiento puso en marcha un dispositivo especial en el que tomaron parte agentes de la Policía Municipal, Policía Foral y Cuerpo Nacional de Policía.

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Desde el Ministerio del Interior informaron ayer de los 316 despliegues preventivos y controles en los que ha participado la Policía Nacional para evitar aglomeraciones y hacer cumplir las medidas anticovid, en los que 1.047 personas fueron identificadas y hubo dos detenidos.

También se elevaron 7 propuestas de sanción por infracciones de tráfico, 9 por tenencia de sustancias estupefacientes, 2 por tenencia de armas y 8 por otros motivos, y se prestó colaboración a Policía Municipal de Pamplona y Policía Foral en el desalojo de botellones" y alteraciones del orden público.

La noche del sábado fue la más complicada y hubo que despejar varias calles por aglomeración de personas (Calderería, Jarauta, San Gregorio y Ciudadela). Además, tres establecimientos de hostelería fueron denunciados en San Juan e Iturrama por no respetar el horario de cierre.

También fue necesario intervenir por botellones en la zona de Compañía, Rincón de la Aduana, plaza Santa Ana, en los barrios de Milagrosa y Txantrea y en la zona de Yamaguchi. Días antes fue disuelto otro botellón en las inmediaciones del Caballo Blanco y en la madrugada del 6 al 7 de julio, unas 600 personas se congregaron bajo el puente de El Vergel en la Rochapea sin cumplir la distancia de seguridad ni usar mascarillas.

El organizador del botellón fue propuesto para una sanción de 60.000 euros y se requisó el equipo de música. Además, fueron identificadas 60 personas y se practicó una detención por resistencia a la autoridad.

Además de estas actuaciones, la Jefatura Superior ha informado de las detención de 19 personas, una de ellas acusada de tentativa de homicidio.

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Tres jóvenes fueron arrestados como presuntos autores de homicidio doloso en grado de tentativa, hurto y atentado contra agente de la autoridad.

Los hechos comenzaron cuando dos jóvenes dejaron sus mochilas junto a las líneas de caja de un supermercado en el que entraron a comprar y a la salida una de la mochilas, con un altavoz valorado en más de 200 euros y efectos personales, ya no estaba.

La víctima y un amigo localizaron a los presuntos autores con la mochila en las inmediaciones del lugar, momento en el que uno de ellos, para evitar que el propietario la recuperase, esgrimió una navaja con la que intentó agredirle. Los agentes localizaron y detuvieron a los presuntos autores del robo, que fueron puestos a disposición judicial.

Además fue detenido como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación otro joven de 18 años tras sustraer una riñonera con objetos personales.

De igual modo y por sendos delitos de robo con fuerza en las cosas fueron detenidos dos hombres que habían sido sorprendidos en el interior de una auto caravana.

Por otra parte los agentes acudieron a una céntrica plaza donde varios jóvenes estaban increpando a los viandantes, a uno de los cuales se le encontró un móvil de última generación que figuraba en las bases de datos como sustraído, por lo que fue detenido acusado de hurto.

Por lo que se refiere a seguridad vial, Policía Municipal ha realizado 1.296 pruebas de alcohol y drogas entre el 6 y el 14 de julio. 27 conductores han sido denunciados y se han incoado diligencias a otras 6 personas.