ste año no habrá fiestas, no puede ser. Sin embargo, lo que no faltará a su cita anual con los vecinos es la publicación Azagra en fiestas, una revista a la que comúnmente se denomina "programa de fiestas" que nació en el año 1949 y que podría decirse que es, junto con los cuadernos azagreses, que son más jóvenes, la única publicación que ha perdurado en el tiempo. Dentro de este ejemplar, que se publica a finales de agosto o principios de septiembre y en el que por primera vez faltará la agenda festiva entre sus hojas, hay pequeñas joyas literarias que no pasan desapercibidas, textos como los que aparecen en Rincones para el recuerdo una sección que celebra su 25º aniversario de forma ininterrumpida.

De la mano de Luis Sola, uno de los azagreses más activos a la hora de preservar y dar a conocer la cultura, la historia y las vivencias locales, nació esta cita con los rincones y recovecos del municipio en 1996.

De acuerdo con Sola la primera publicación surgió "sin saber si iba a tener continuidad". Y es que, en el año 1995, añadía, arrancaron las charlas sobre Azagra que dieron paso a los cuadernos, "por lo que estaba caliente la idea de recuperar la historia local y se me ocurrió la posibilidad de abrir esta sección". De hecho, puntualizaba, "la revista es un eco de Azagra, hace mucha ilusión recibirla", sobre todo a los azagreses ausentes, a aquellos que viven fuera y a los que antes se les enviaba un ejemplar.

Mucho que ver en su origen tuvo Ángel Monreal ya que, a raíz de una sección previa de la revista que se llamaba Qué añora de Azagra (pensada para los vecinos que vivían fuera), él abrió la veda de la escritura con Añoranzas azagresas, escritos con los que se remontaba a su infancia, a los años 90 del siglo XIX. "Con esa idea y ese espíritu yo recogí el testigo plasmando, con cierta sucesión, los años 20, con las historias de mis padres, y los años 50 con las mías propias", explicaba Sola.

la temática El primer Rincones para el recuerdo habló sobre Rincones para el recuerdoEl boulevard, mientras que el año siguiente el tema elegido fue Las Belenas.Las Belenas Con el paso del tiempo los vecinos han conocido más de cerca Las tabernas, El lavadero, Las eras, El rebote, El cine, El colegio, La plaza, Las bodegas, Las fuentes o Las casas blasonadas, entre otros muchos lugares.

Son sitios que subsisten hoy en día pero de los que Sola intenta rescatar el estatus de su época anterior. "El texto tiene una parte informativa pero, sobre todo, una parte afectiva, con cierta añoranza y nostalgia". De hecho, estos espacios aparecen muy ligados a vecinos, que son los que, en parte, le dan sentido a todo".

Este año, desvelaba Sola, la sección se centrará en La epidemia del cólera y viruela en 1855 porque "venía como anillo al dedo".

continuidad Con el paso del tiempo, aunque en el fondo todos los textos han seguido un estilo, lo cierto es que a partir de la tercera edición, cuando ya se consolidó, la extensión se incrementó y pasaron a ser escritos más extensos. Al principio eran evocaciones a la generación anterior, a la de sus padres, y luego ya abordó su infancia. "La idea es siempre hablar de temas del pasado, de evocaciones pasadas".

El objetivo de estas publicaciones, que normalmente enganchan más a gente mayor, es que la juventud conozca los tiempos pasados, "recuperar la intrahistoria, esa historia menuda, lo que se olvida en las grandes historias; se suele preservar y recordar lo grande, pero realmente lo que da sentido a todo es lo que pasa alrededor, lo que puede resultar desapercibido. La transformación de estos sitios es total porque la vida fluye, nada permanece".

De momento este azagrés, Doctor en Filosofía por la Universidad de Deusto e involucrado también de lleno en otras actividades como el club de lectura o las visitas guiadas por el casco urbano azagrés, no se plantea cambiar la serie a otra temática aunque asegura que se podrían abordar muchas cuestiones. "Me da pena acabarlo", y es que, insiste, quedan muchos rincones recurrentes sobre los que hablar; cada esquina, cada tienda, cada anhelo y recuerdo tiene una historia tras de sí.

El autor de esta sección, que siempre evoca al pasado, asegura que la idea es preservar la historia de estos sitios que, pese a su transformación, permanecen.

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Un cuarto de siglo de temas, de rincones y recovecos de la localidad han aparecido en la revista 'Azagra en fiestas' como 'La Barca', 'La escuela', 'La calle Mayor', 'El baile', 'Los bares' o 'Las bodegas', entre muchos otros.