La txistorra volvió ayer a ser protagonista de una animada mañana en Arbizu, embutido que ha dado fama internacional a este pueblo. Por ello, hace once años el Ayuntamiento decidió dedicarle una fiesta, una celebración que ha sabido ganarse un hueco en el calendario festivo de otoño el segundo domingo de octubre. Lo cierto es que ayer cientos y cientos de personas volvieron a acercarse a esta localidad para disfrutar de esta jornada en la que se vuelcan los y las arbizuarras, en torno a 80 personas, las otras estrellas de esta fiesta. Y es que es posible gracias a un auzolan en el que los y las vecinas se repartieron diferentes tareas, sin apenas tregua en toda la mañana.

Por las manos de Mikel Gartziandia, Ruben Gelbentzu y Miguel Mendinueta, encargaron ayer de la cocina, pasaron 120 kilogramos de txistorra donada por Embutidos Arbizu, Flores y Laket, en torno a 2.000 pinchos que acompañados de vino se repartieron durante la mañana al precio de 2 euros. Mientras, otro grupo elaboró txistorra y morcilla a la manera tradicional y la quesería Juananeko mostró cómo se hace queso, entre otras tareas. Asimismo, se pudo ver cómo trabajaban algunos artesanos en viejos oficios. La mañana de ayer también fue para comprar, con una amplia oferta con 47 puestos en total, con la txistorra en lugar destacado y otros productos como miel, queso, mermeladas, pasteles, huevo o verdura, con un puesto en el que se asaron pimientos.

De poner música a esta fiesta se encargó el coro de Arbizu y Xapiru Trikitixa Eskola, que ayer reunió a un centenar de trikitilaris y panderojoles de toda Navarra. Por la tarde se celebró la cuarta edición del festival de escuelas de trikitixa de Navarra.

CONCURSOS El premio del concurso de pinchos se quedó en Arbizu. Y es que Endika Mendinueta se llevó la txapela y los 300 euros de este certamen que busca explorar las posibilidades de la txistorra en la gastronomía. Se presentaron nueve propuestas. La suya, de nombre Ifrentzua, era una empanadilla de txistorra con cebolla caramelizada y crema de champiñones, además de paté de piquillo y almendras. “Son unos sabores muy equilibrados, con la cebolla para suavizar”, apuntó Javier Díaz, chef del restaurante Alhambra y miembro del jurado junto con Fernando Flores, de Enekorri; la actriz Anabel Arraiza; Itziar Inza, responsable de comunicación de Reyno Gourmet; y Nerea Caballé, del restaurante Izar-Ondo de Arbizu. “Me ha sorprendido que no sea un cocinero profesional”, observó Díaz, . Y es que este arbizuarra de 30 años, es auxiliar de enfermería. “Me gusta cocinar y experimentar. Es la primera vez que me presento y es difícil porque la txistorra tiene un sabor fuerte”, apuntó. Por ello, experimentó la receta durante toda la semana con sus padres y novia. “El esfuerzo ha merecido la pena”, destacó.

El pasado año, con motivo del décimo aniversario, comenzó su andadura el concurso literario Letrak, ahora, con dos modalidades: poesía y narración breve. Se presentaron seis trabajos. En la primera el premio fue para el guipuzcoano Antonio Casado da Rocha, con una canción irlandesa en torno a la txistorra, una propuesta muy original, según destacaron Castillo Suárez y Asier Serramo, miembros del jurado. En narrativa volvió a ganar Joxe Aldasoro, de Etxarri Aranatz, con un relato en el que mostraba el día a día de una mujer en la cocina. El premio era 100 euros y la publicación de los obras con ilustraciones de Maite Gurrutxaga.