Más de 60 personas responsables o participantes en el programa de Empleo Social Protegido de la Ribera se reunieron esta semana en Tudela para intercambiar experiencias y mostrar la importancia que tiene en el desarrollo de mujeres y hombres que encuentran problemas para insertarse en el mercado laboral.

Actualmente en la Ribera todos los Servicios Sociales: (Buñuel, Mancomunidad de servicios sociales de valle del Queiles, Servicios Sociales de Castejón, Servicio Social de Corella, Mancomunidad de Servicios Sociales de Cintruénigo-Fitero, Servicio Social de Tudela, Servicios Sociales del área de Cadreita) cuentan con este recurso del Gobierno de Navarra que leva más de 20 años en funcionamiento.

Algunos de los protagonistas hablaron de su experiencia al participar en este programa que como señaló Manuela Hornillo, educadora social de Cintruénigo, “están en situación de dificultad, de vulnerabilidad vienen con mochilas de su vida que ha sido difícil y se trata de transmitirles ayuda, una respuesta a través del empleo que dignifica”. Si algo destacaron todos los participantes fue el impulso que significa para su autoestima el volver a trabajar, formarse, aprender y darse cuenta de que se puede valer por ella misma como cualquier persona. Los trabajos que los ayuntamientos participantes ofrecen están en residencias (apoyos, limpieza de plantas, conserjería, lavandería o cocina), en piscinas, además de apoyos a la brigada para calles o jardinería.

Al mismo tiempo se les ofrece formación para capacitarles y “darles un empujón de autoestima. Dicen ‘no se hacer nada’ y les mostramos que si saben, tienen una experiencia y una vida laboral. Tratamos de que vuelvan a creer en ellos mismos y la sociedad también”.

Uwa Aguebor Edo solo tiene palabras de agradecimiento para Manuela, que “durante tantos años me ha ayudado”. En 1999 llegó a Cádiz desde Gambia y tras unos años vino a Navarra, donde vive en Cintruénigo. “Soy la única mujer trabajando en el Empleo Social en Cintruénigo y me encanta hacer de todo. Es una gran oportunidad. Si no fuera por Manuela y otras no podría expresarme así y quiero dar las gracias al Gobierno. Estoy cumpliendo un sueño y me están ayudando muchísimo. Lo siento como mi sitio y como mi país”.

Miguel Ángel, de SS de Buñuel explicó que “es una inyección de oxígeno, estoy muy contento por la oportunidad que me han dado”. Leyre, monitora en Cascante aseguró que “todos los días aprendo algo de vosotros. En mi caso la mayoría son mujeres que vienen con muchas historias a la espalda y están luchando para sacar adelante a su familia”. María del Carmen, de SS de Cadreita trabaja con persona mayores, “me valoro más, veo que puedo salir adelante y que valgo para esto”. Por último, en los SS de Tudela Ismael aseguró que “llevo toda la vida en la construcción pero me han enseñado mucho. Necesitaba trabajar, es una gran oportunidad para demostrar que valemos”. Su compañera Lucía destacó la “paz y armonía del grupo, me está viniendo muy bien porque me ayuda a seguir adelante”.

El Empleo Social Protegido está subvencionado por el Gobierno de Navarra y cofinanciado por el Fondo Social europeo que apoya proyectos de interés colectivo y no lucrativo para la contratación laboral temporal de personas en riesgo de exclusión social y con dificultades para el acceso a puestos de trabajo. Este recurso cuenta con tres patas: participantes, personal de apoyo y formación.