Banda de Música de Artajona
Intérpretes: Coro De Carlos (dirección, Beatriz Jimeno). Ricardo Oficialdegui, director titular. Jacob de Hann, director invitado. Programa: monográfico de Jacob de Hann: Oregón, Rossi Roy, Missa Brevis, Viterbo, La Antigua, To a Friend, Kingdom of Navarra y Sa musica. Lugar: Museo Universidad de Navarra. Fecha: 24 de junio de 2023. Incidencias: Casi lleno (10 euros).
En Artajona reina la música. Maravilloso. Los que tenemos cierta edad recordamos milagrosos acontecimientos musicales en pueblos de la periferia que nos sorprendieron; por ejemplo: “Aras, un pueblo que canta”, La coral de Falces, que hizo sus grabaciones, o la de Elizondo con Eraso, que tocó el cielo, y más… Los conjuntos musicales de Artajona (banda y coro, sobre todo la banda que dirige Ricardo Oficialdegui), son acontecimiento musical. Con una solvencia magnífica. Tanta como para enfrentarse a las partituras y dirección de un gran compositor y director de música para banda, Jacob de Hann, otro descubrimiento. Estamos ante una música tonal, cercana a la música de cine, donde prevalece la melodía, el lirismo, la descripción paisajística y de estados de ánimo, fácil de escuchar, y, sobre todo, excelentemente compuesta para el orgánico de la bande de viento y percusión. Las obras presentadas en el programa sacan todo el esplendor al conjunto, y hay una gran sabiduría de orquestación en el autor: por ejemplo en el tratamiento de los graves –espléndidos varas, bombardinos, tubas, saxos…– que todo lo tamizan para que nunca el sonido resulte chillón; muy al contrario, la trompeta, flauta, clarinetes… quedan estupendamente cubiertos. Un ejemplo, en el estreno de Kingdom of Navarra, cuando las descaradas –y alegres y señoriales– gaitas plantean el tema, la respuesta inmediata es del viento grave: todo queda compensado. El programa es una muestra bastante completa del estilo de Hann, incluyendo el estreno homenaje a Artajona.
Comienza el concierto con Oficialdegui en el podio y la obra Oregón: un pasaje típico del Oeste Americano con la recreación de extensas llanuras en los tramos lentos, y elevaciones monumentales en las trompetas; la banda soluciona bien el final rápido. Ross Roy es un desenfadado juego académico, con lirismo en el solo de saxofón, algo de heroísmo y marcialidad, y un optimista final muy extravertido. Se incorpora el coro (Coro de Carlos) en la Misa brevis, compuesta, también, con gran sabiduría y respeto a las voces. Hann sabe que una banda puede tapar a mil voces, así que no sólo retiene el sonido, sino que, en muchos fragmentos, la banda se calla para que entre el coro. La partitura es un poco monocolor, más bien recogida, casi no se exalta ni en el Resurrexit, pero tiene un hermoso Benedictus, y una preciosa melodía de súplica en el Agnus.
En la segunda parte, Jacob toma la batuta; es, además un gran director. Su transmisión a los músicos y al público es jovial, directa, emocionante. Viterbo es una partitura vitalista, con el esplendor de la clásica música de banda, que hace disfrutar al que la hace y al que la escucha; muy bonito el tramo de clarinetes sotto voce. De La Antigua destaco la solemne marcha procesional. Y de To a friend, el sereno y nada dramático matiz fúnebre. Y llegamos al estreno de Kingdom of Navarra, llena de citas reconocibles muy bien ensambladas y, en algunas, yendo a la paráfrasis, como en el caso del himno de las Cortes. Tiene de todo: una magnífica fanfarria arcaizante, de entrada (a la altura del Cerco), rotundos graves wagnerianos, y toda la saltarina alegría de la fiesta con las gaitas. Y un detalle que no es baladí: una campana, muy bien afinada por cierto, bandeada y totalmente injertada en la banda. Alguna vez, en una sinfonía de Mahler, he visto campanas de verdad, pero sin bandear. El bandeo es otra cosa. Sa musica cierra la sesión, otro divertimento para todos, con Nuria Echarri de solista. Un concierto redondo. Con unas excelentes notas al programa en papel. Enhorabuena a todos, sobre todo a R. Oficialdegui por su ingente trabajo.