Lo ocurrido en las fiestas de la juventud y del Puy pasó desapercibido para la gran mayoría, salvo algunos detalles encriptados que han ido saliendo poco a poco y que demuestran que el ambiente se sigue deteriorando. Primero después de que sendas investigaciones judiciales sigan la pista de 27 denunciados entre varios cientos, por los actos de la Bajadica del Puy -que finalmente quedó suspendida desde alcaldía- o el juicio que todavía está pendiente a los componentes del grupo musical estellés Raimundo el Canastero, que sacaron una canción contra la alcaldesa, sí, pero sobre todo por otros temas como la prohibición de que las txosnas ocuparan su espacio en la estación y los relegarán a un rincón apartado de Los Llanos o la prohibición a la peña La Bota de poner su barraca en la plaza de Santiago. Otro episodio que ha venido coleando, y que también se ha archivado, fue la causa contra el jefe de la Municipal de Estella, Rodrigo García de Galdiano, que, al parecer ‘interceptó’ a la concejala Eli Ciordia con una ikurriña en el balcón del Ayuntamiento, y cuya causa también fue archivada, aunque desde el equipo de Gobierno de UPN se siga con su denuncia administrativa.
Todo ello en unas vísperas de las fiestas de la juventud y del Puy que fueron un ejemplo de buen ambiente, salvo excepciones como las protagonizadas por alguna pegatina ominosa contra la alcaldesa y por alguna concejala de UPN, que al parecer, conminó a que se quitara una pegatina a un chaval de 15 años, o la de algunas cuadrillas que decidieron solventar sus cuitas en el casco viejo el sábado en plena fiesta. Convertir todo esto en materia judicial que sirva de mecha en el futuro es una responsabilidad que debería calibrarse en su justa medida.
No se puede tolerar ningún tipo de amedrentamiento social de unos sobre otros. No. Lo que toca es echar marcha atrás y si se puede, marcha hacia el futuro, para ver de qué forma se puede salir de este bucle. Porque vivir en Estella-Lizarra pasa por que los vecinos y vecinas tengan claro que ellos saben cuál es el marco de la convivencia, y no las consecuencias que conlleven las decisiones judiciales. En eso estaban el 99 por ciento de los vecinos de Estella-Lizarra el sábado 24 en las fiestas de la juventud, junto con los que al día siguiente celebraron desde primera hora de la mañana, la Virgen del Puy.