Moda oculta, la tendencia del día

Vivimos en una sociedad adicta a la moda, en donde comprar e ir a la última es fundamental. Mientras tanto, unas empresas se benefician y otros países sufren las consecuencias de esto. A pesar de ello, el problema no es que las empresas solo busquen beneficios, sino que nosotros favorecemos su mercado con la compra de sus productos.

Diseñadores, marcas y empresas famosas, que para obtener un mayor beneficio se tapan los ojos sin mostrar las condiciones laborales a las que están sometidas sus trabajadores, a pesar de que los edificios donde trabajan se derrumben. Los empresarios se lavan las manos ante estos problemas, haciendo subcontratas en países subdesarrollados en donde los ciudadanos desconocen sus derechos, evitando ser los culpables de estas situaciones.

Parece que a la sociedad occidental este tema no nos interesa, pues en estos momentos de crisis lo que realmente importa es consumir barato sin saber quién, cómo o en dónde lo han producido, y ojos que no ven, corazón que no siente.