Parece que la búsqueda de un intermediario o relator para intermediar en el conflicto con Cataluña es una infamia o un sacrilegio nacional, cuando en tiempos no muy lejanos los gobiernos del PSOE Y PP han tenido conversaciones con intermediadores para hablar con la banda ETA, en Argel, en Francia, en Suiza y también en alguna basílica o iglesia del País Vasco y también en algún caserío. Yo creo que en caso extremo y, para facilitar la paz y la concordia, sí es necesario traer a un relator, intermediario, moderador o como se le quiera llamar, siempre debe ser bienvenido. En otros países en conflicto, como en Irlanda del Norte, también ha habido mediadores y personas reconocidas mundialmente (Koffi Annan, Nelson Mandela, etcétera) que sin duda han facilitado la negociación para llegar a un buen acuerdo entre las partes. Así ha sido, como digo, con ETA, el IRA y con otros muchos conflictos muy complicados. Por la paz, todo lo que se haga es poco. Lo que no es nada normal es que hasta algunos barones del PSOE y, por supuesto, la derecha, se echen las manos a la cabeza, insulten y ataquen despiadadamente al presidente y hasta convoquen una manifestación en su contra por su proceder. No corren buenos tiempos para el sosiego y la tranquilidad, parece que es la derecha la que quiere mandar, y pronto, en España y, por eso, día sí y día también están saliendo a los medios con un trato inexplicable, insólito y verdaderamente casi prebélico, solo porque el gobierno y su presidente quiere la paz y quiere estabilidad en Cataluña. Como yo, miles y miles de personas no entendemos a esta derecha que se cree con derecho a todo, y eso no es así.