Imagino que este titular sorprenderá al lector. ¿Cómo puedo afirmar esto de un ayuntamiento que en su página web expresa su apuesta por una movilidad eléctrica, que contribuya a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, de ruido y que mejore la calidad del aire en la ciudad? Un ayuntamiento que bonifica el impuesto de circulación, que excluye los pagos de estacionar en las zonas azules, rojas, naranjas y restringidas sin limitación de tiempo, que ha llegado a anunciar a bombo y platillo que instalará 40 puntos de recarga para coches eléctricos. Lo afirmo porque el Ayuntamiento de Pamplona me niega la instalación de un enchufe para cargar mi coche en la plaza de garaje de concesión pública que disfruto en la plaza de la calle Compañía.Sí, como suena, en este momento llevo más de 14 meses, en aquel momento liderado por Bildu y ahora por Navarra Suma, desde que inicié los contactos con la gestoría del parking y el Área de Movilidad para que me permitan un enchufe normal y corriente (de esos que utilizamos para alimentar nuestros electrodomésticos), no me hace falta más, y todavía no he recibido ni siquiera una respuesta. ¿Será por su enorme complejidad? ¿Será porque no han tenido tiempo de estudiar un expediente tan complejo? ¿O simplemente hablamos de un departamento con ninguna vocación del servicio al ciudadano y que se opone a los cambios en movilidad de los que tanto alardea? En fin, sigo sin noticias y no me queda más remedio que acudir al Tribunal Administrativo.