Los fans de la saga de Harry Potter recordarán al director del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, Albus Dumbledore, cuando extraía los recuerdos de las personas con su varita mágica y los depositaba en un pensadero que permitía revivirlos en cualquier momento.El multimillonario empresario sudafricano Elon Musk no es ningún mago pero actualmente lidera un ambicioso proyecto, denominado Neuralink, que pretende conectar nuestros cerebros a las computadoras. Se trata de implantar un chip en el cerebro humano que permitiría no sólo acceder a nuestros recuerdos, sino ayudar a curar enfermedades neurológicas como el Alzhéimer, la epilepsia, pérdida de audición, depresión, adicción o parálisis cerebral.Además, mediante el chip, las personas serían capaces de controlar con la mente las aplicaciones de los teléfonos móviles u ordenadores, la tecnología de un edificio inteligente y muchas cosas más. Precisamente, el pasado 28 de agosto tuvo lugar una exposición de los avances de este proyecto y la presentación en sociedad de la cerdita Gertrude, quien tuvo implantado en su cerebro uno de estos chips durante dos meses.Algunos científicos y expertos en medicina física consideran que esta tecnología es una verdadera revolución, pero todos insisten en que todavía falta un largo camino de pruebas hasta que se comercialice con total seguridad.Pero Musk es un visionario y no tiene ninguna intención de rendirse porque considera que la fusión de la mente con la inteligencia artificial va a suponer una enorme mejora para la salud y el bienestar de las personas.