Estamos en plena campaña electoral y no he oído a ningún partido político que inste a Osasuna a que compre el estadio de El Sadar y así estar en paz con todos los navarros y navarras en lo referente a la deuda que tenía contraída la entidad con la Hacienda Foral. Como todo el mundo sabe, el estadio de El Sadar es un estadio de titularidad pública, que pertenece al Gobierno de Navarra, de uso exclusivo del Club Atlético Osasuna para sus competiciones deportivas. El club contrajo una deuda hace años y para saldarla, en parte, ofreció el estadio como pago, y el Gobierno de Navarra aceptó este ofrecimiento. Actualmente, Osasuna va a recibir una cantidad nada desdeñable de dinero de diversos ámbitos, ya sea por derechos de imagen, televisión, créditos, etcétera, y sería muy de agradecer que con ese dinero se comprara el estadio de El Sadar al Gobierno de Navarra y se lo quedara el club en propiedad como anteriormente lo fue. Sería un dinero que vendría muy bien para utilizar en deporte base, por ejemplo, o para desarrollar actividades deportivas donde se inculcara los principios que el club Osasuna predica con el ejemplo, y que ahora se agrandan con la proyección que puede tener si vamos a alguna competición europea.

Así pues, se puede instar al Club Atlético Osasuna a comprar el estadio El Sadar e invertirlo en actividades relacionadas con los principios que propugna el club. O en otra cosa, que hay mucha necesidad.