Leo con envidia cómo está administrada la enseñanza y, por ende, el tema de los docentes en Cataluña. Aquí en Navarra por mor de un senior llamado Carlos Gimeno, a su vez autorizado por la señora Chivite (presidenta de Navarra) y con la complicidad de unos ineptos y serviles sindicatos; decenas y decenas de docentes que estamos a las puertas de la jubilación y que hemos trabajado de interinos desde hace doce, quince, o veinte años, hemos ingresado a final de agosto en esa lista de parados, que no sabemos si de corta o larga duración.
Después de toda una vida enseñando, de toda una vida preparándonos año a año con formación y cursos; el Sr. Gimeno dice que quien saque una mala nota en un examen de oposiciones no está cualificado para enseñar. Es decir, que una maestra recién salida de la universidad, con veinte años y que saque una buena nota en las oposiciones (es lo normal), está más cualificada que un maestro que lleva toda su vida enseñando y que ya está hasta el gorro de estudiar para oposiciones. Pero no pasa nada. Para la señora Chivite, para el señor Gimeno y para la mayoría de los sindicatos a los que pagamos nuestra cuota; los interinos en Navarra somos unos parásitos enchufados que queremos vivir del cuento. Y como ese es el discurso que ha calado a nivel popular, que nos den a los que seguimos mirando las listas de docentes deseando que los compañeros que están trabajando se den de baja para poder nosotros volver a trabajar. Esto es lo que hay, señora Chivite, señor Gimeno y compañeros de los sindicatos.
Y mientras tanto, el señor Sánchez ignorando y ninguneando las directrices que le llegan de Europa sobre los interinos. Lo peor de esto es que nos tenemos que aguantar; porque si gobernara UPN, su repuesta sería peor. Congelar las listas durante el curso o durante dos cursos, algo que pasó ya en el pasado. Y si no, preguntadle al senor Iribar. Resumiendo, queridas y queridos docentes para dos y cabreados. Esto es lo que tenemos en la, según los últimos ránkings, la autonomía con mejor calidad de vida de España. Pero no precisamente para los docentes parados.